Andrés Manuel López Obrador se comprometió a dar continuidad a la lucha contra el crimen organizado emprendida por el presidente Felipe Calderón, aunque con un cambio estratégico ante la falta de resultados.

 

“Nosotros vamos a darle continuidad a la lucha contra el crimen organizado. La quiero ampliar. Vamos a darle continuidad, pero va a haber cambio de estrategia. Para resumirlo: continuidad con cambio. No vamos a seguir con la misma estrategia porque es evidente que no ha funcionado”, apuntó el candidato presidencial de las izquierdas.

 

Durante su conferencia de prensa matutina, el tabasqueño consideró necesario atender las causas del actual clima de violencia que prevalece en todo el país, pues indicó que el problema no “surge de la nada”, sino a partir de la falta de oportunidades de trabajo y de bienestar.

 

También ofreció combatir a fondo la corrupción imperante y a lograr un manejo eficiente en lo referente a las tareas de seguridad pública mediante la coordinación con los distintos niveles de gobierno.

 

“Voy a estar hablando con los soldados, con policías, con ministerios públicos, con presidentes municipales, con gobernadores. El país requiere de liderazgo para sacarlo adelante, no se puede con un administrador público y mucho menos con Enrique Peña Nieto, esa es la realidad”, manifestó.

 

Al ser cuestionado sobre la investigación en una corte de Texas por enriquecimiento ilícito y vínculos con el narcotráfico en contra del ex gobernador de Tamaulipas, Tomás Yarrington, López Obrador apuntó que el caso evidencia la corrupción al interior del PRI.

 

“Es un régimen podrido, de corrupción, y es lo que quieren sostener. ¿Quién promueve al ex gobernador de Tamaulipas? Pues Peña Nieto. ¿O estoy diciendo mentiras?”, cuestionó el tabasqueño, quien consideró absurdo que el candidato presidencial del tricolor intente deslindarse de personajes como Yarrington y el ex gobernador de Coahuila, Humberto Moreira, dada su cercanía política.

 

Al hablar sobre la adhesión de Manuel Espino, ex presidente del PAN, a la campaña de Peña Nieto, el abanderado del Movimiento Progresista aseguró que no le sorprende, ya que el partido blanquiazul y el tricolor “comen del mismo plato”.

 

“La verdad es que no es ninguna novedad porque son lo mismo. Yo puedo probarles que desde el 2006 tenían acuerdos Espino y Peña Nieto. Hay evidencias”, aseveró López Obrador, quien recordó la manera en que Espino promovió una alianza con el PRI en las últimas elecciones estatales en Chiapas con el fin de evitar el triunfo de las izquierdas.