La negligencia de los consejeros electorales de Chiapas permitió que en las elecciones para diputados locales se fraguara un fraude que involucró a 10 mil votantes chiapanecos, quienes votaron desde el extranjero sin haber salido del país.

 

En la víspera, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) ordenó la destitución de los siete consejeros del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Chiapas por omisiones graves durante los pasados comicios locales.

 

Además de permitir el fraude electoral del voto en el extranjero, los consejeros chiapanecos omitieron aplicar las reglas constitucionales de paridad de género y permitieron que la mayoría de partidos registrara sólo a candidatos hombres.

El fraude 

 

Durante las elecciones de 2015, en Chiapas se incluyó la figura de diputado migrante, un legislador local que, de manera inédita,  sería elegido por votantes del estado radicados en el exterior.

 

Con un presupuesto de 12 millones de pesos, el órgano electoral contrató a la empresa DSI Elecciones, para desarrollar un sistema electrónico de votación y un padrón de chiapanecos radicados en el extranjero.
El fraude consistió en que la empresa válido el registro de casi 17 mil votantes chiapanecos en el exterior, la mayoría en Estados Unidos y también en países como Uganda, Armenia, Vietnam, Angola, Liberia, Cabo Verde, República Checa y Trinidad y Tobago, sin comprobar que radicaran en esas naciones.

 

Durante las diligencias se descubrió que la mayoría de registros fueron alterados, es decir, personas que nunca habían salido de Chiapas fueron registradas como votantes en el exterior y cuando buscaron ejercer su sufragio se encontraron con que habían sido dadas de baja del padrón.

 

También miles de registros, que en teoría debieron realizarse desde el extranjero, se descubrió que fueron dados de alta desde servidores al interior del Instituto Local de Chiapas.

 

Como consecuencia, los siete consejeros del órgano local chiapaneco fueron destituidos por negligencia; el diputado ganador, Roberto Pardo Molina, fue desaforado y, hasta el momento, por parte de la empresa sólo su representante legal, Carlos Díaz, ha sido detenido.

 

“Algún pariente lejano votó en las elecciones federales con su domicilio en Chiapas y en la elección local ya no pudo votar, porque apareció con un domicilio allá por Miami, adelante en un pueblillo de Miami, donde aparecen varios chiapanecos registrados. Yo creo que mi pariente apenas y ha salido de Chiapas y menos podría pensar tener un domicilio en Estados Unidos”, dijo el magistrado Pedro Esteban Penagos para ilustrar la mecánica del fraude.