El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) presentó su Informe de Evaluación de la Política de Desarrollo Social 2014, donde destaca que algunos de los retos de este rubro son la falta de un financiamiento adecuado y la dispersión de los programas.

 

En el documento se señala que el mayor problema que enfrenta el gobierno es que desde 1992 el ingreso de las familias mexicanas ha venido a la baja, lo cual implica mayor pobreza. La salida para solucionarlo es la creación de empleos formales y bien remunerados, pero los números indican que no ha pasado, es más, la seguridad social es la carencia más alta con graves consecuencias a futuro.

 

Para combatir la pobreza, añade el Informe de Coneval, en la última década se crearon diversos programas de desarrollo social en los tres niveles de gobierno, pero eso no significa por sí mismo un avance.

 

Se contabilizaron 5 mil 904 programas, entre federales, estatales y municipales, pero muchos de ellos están dispersos o carecen de información para ver su impacto en la población.

 

Además, aunque en las últimas dos décadas se incrementó la cobertura en salud y educación, estos servicios quedaron estancados en su calidad y, como ejemplo se pone el Seguro Popular, cuyos beneficiarios son quienes más quejas interponen por mala atención, o las pruebas PISA que en su pasada edición (la de 2012) México se ubicó en el lugar 53 de 65.

 

Coneval también encontró avances en las políticas sociales, siendo la creación de indicadores específicos para la medición de la pobreza y la adecuación de los objetivos de los programas para mejorar el ejercicio de los derechos y la productividad de los hogares los más destacados.

 

MG