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RÍO DE JANEIRO. Joao Santana, quien fue jefe de la campaña de los ex presidentes de Brasil, Dilma Rousseff y Luiz Inacio Lula da Silva, fue condenado hoy a ocho años y cuatro meses de cárcel acusado de lavado de dinero.

 

La sentencia a Santana se dio en el marco de la Operación Lava Jato que investiga los desvíos de recursos desde la estatal Petrobras.

 

El juez Sergio Moro –que dirige el “caso Petrobras”- también condenó a prisión a otras cinco personas, entre ellas la esposa de Santana, Mónica Moura, a la misma pena, y al extesorero del Partido de los Trabajadores (PT) de Lula y Rousseff, Joao Vaccari.

 

“El lavado de dinero tuvo especial sofisticación, con una constitución de empresas off shore en el extranjero, el uso de la apertura de por lo menos una cuenta secreta en el exterior”, señaló en su sentencia Moro, en referencia a Santana, también sospechoso de sus actividades cuando asesoró a otros mandatarios en países como Venezuela, El Salvador y Angola, entre otros.

 

Santana y su esposa están acusados de recibir cuantiosas sumas de dinero no declarado en el exterior proveniente de empresas que habrían aportado de manera ilícita dinero a la campaña como retribución al trato de favor obtenido por esas corporaciones en la adjudicación de obras públicas, sobre todo vinculadas a Petrobras.

 

La condena emitida este jueves se refiere a los depósitos realizados por el representante de la empresa naval Keppel Fels a una cuenta de Santana y su esposa en Suiza que no había sido declarada a la Hacienda brasileña.

 

El monto depositado, según los investigadores, está destinado al pago de deudas de las campañas del Partido de los Trabajadores (PT).

 

Detenidos en febrero de 2016, Santana admitió haber recibido 4.5 millones de dólares en cuentas en el exterior durante la campaña de Rousseff en 2010, y son objeto de otra causa por recepción de dinero de origen supuestamente ilícito de la constructora Odebrecht.

 

 

OR