MANCHESTER. Los aspirantes demócratas y republicanos a la Casa Blanca cierran hoy con grandes eventos y ruidosas multitudes su campaña en Nuevo Hampshire, en vísperas de unas primarias que estos días han revolucionado este pequeño estado del noreste del país.

 

Hasta cuatro actos celebra hoy la ex secretaria de Estado Hillary Clinton en Nuevo Hampshire, un estado simbólico para la dinastía Clinton pero donde la ex primera dama va segunda por, entre otras razones, la cercanía del estado de su rival, el senador por Vermont Bernie Sanders, autoproclamado “socialista”.

 

“En estas últimas horas de campaña, quiero que imaginen qué es lo mejor para este país. Creo que lo mejor para este país es un buen liderazgo”, señaló Clinton en un mitin en Manchester, la ciudad más poblada de Nuevo Hampshire, acompañada por su esposo, el exmandatario Bill Clinton, y su hija, Chelsea.

 

La multitud, compuesta en su mayoría por personas de mediana edad y muchas mujeres, respondió a Clinton con ganas, agitando carteles azules -el color del Partido Demócrata- y en donde podía leerse la frase “luchando por nosotros” acompañada de la “H” de Hillary.

 

En el bando republicano, el magnate Donald Trump también decidió hoy añadir algunos actos a su agenda, entre los que destaca un íntimo encuentro con votantes en Londonderry, una pequeña ciudad del oeste del estado, y un multitudinario discurso en un estadio de Manchester con capacidad para 10 mil espectadores.

 

El magnate aglutina en este pequeño estado de la región de Nueva Inglaterra un apoyo del 31.6 % por encima de los dos senadores de origen cubano, Marco Rubio (31.6 %) y Ted Cruz (13 %), según la web RealClearPolitics, que elabora una media de todas las encuestas nacionales publicadas en Estados Unidos.

 

Tantas pasiones despierta Trump en Nuevo Hampshire que el encargado de una tienda de tatuajes de Manchester ha decidido ofrecer a cualquiera que se acerque a su establecimiento un tatuaje gratis con la cara del magnate o con su lema: “Hagamos a Estados Unidos grande de nuevo”.

 

“Nadie ha ganado la Presidencia hablando en términos tan negativos”, dijo a Efe, sin embargo, el votante Scott Aronowitz.

 

Fiel al espíritu de Nuevo Hampshire, Aronowitz ha visto a diferentes candidatos en diferentes bares, le ha gustado el senador Sanders, pero asegura que decidirá su voto -como hacen muchos vecinos del estado- a última hora en función de los encuentros finales con los candidatos.

 

Este tipo de votantes, republicanos e indecisos, es el público al que apelan en estas últimas horas los aspirantes más moderados a la nominación presidencial republicana.

 

“Debemos de volver a nuestros valores comunes. Nos estamos alejando de forma peligrosa los unos de los otros. La extraordinaria variedad de este país no puede ser una debilidad, debe seguir siendo una fortaleza”, destacó hoy en la localidad de Nashua el exgobernador de Florida Jeb Bush, hijo y hermano de expresidentes.

 

Bush ha pasado mucho tiempo haciendo campaña en Nuevo Hampshire y lucha por ofrecer una alternativa a Trump y ser la elección “moderada” del Partido Republicano contra Rubio y, especialmente, contra los gobernadores John Kasich y Chris Christie, que también buscan en este estado un impulso para seguir vivos en la campaña.

 

En Nuevo Hampshire, a diferencia de los “caucus” (asambleas populares) de Iowa, los votantes depositan su papeleta en una urna y sus primarias son abiertas, lo que permite participar a los ciudadanos “independientes” y no registrados con ningún partido político.

 

Tres pequeñas localidades de Nuevo Hampshire votan a medianoche, pero la mayoría de los colegios electorales permanecerán abiertos este martes entre las 07:00 y las 19:00 hora local (12:00 GMT del martes y 00:00 GMT del miércoles), con excepción de Manchester, donde las urnas abren una hora antes.