El arbitraje mexicano sigue sin tocar fondo, pero se encuentra sumido en una severa crisis que se refleja jornada a jornada. Edgardo Codesal, asesor de la Comisión de Árbitros, sabe que algunos silbantes carecen de personalidad, y la técnica no es la óptima, lo que provoca graves fallas.

 

“Hace rato que estamos en crisis, eso no es ningún descubrimiento. Yo no le tengo miedo a las palabras crisis, al fracaso. No le tengo miedo a nada, afortunadamente, y como así es mi personalidad lo primero que le voy a pedir a nuestros árbitros es personalidad”, dijo.

 

No quiere que lo tomen como ejemplo, lo único que le pide a los silbantes es total concentración durante los partidos. Criticó el trabajo de Ricardo Arellano, quien no expulsó a Carlos Darwin Quintero por una patada en contra de Marco Palacios, y no marcó una falta sobre Michael Arroyo, en el choque del fin de semana entre Morelia-América.

 

Defendió la labor de Francisco Chacón por no marcar un penal por una barrida de Óscar Rojas sobre Hirving Lozano en el Pachuca-Toluca. Alabó a Jorge Isaac Rojas, que tampoco se “equivocó” en la jugada entre Tiago Volpi y Julio Furch.

 

“Estamos teniendo errores de concentración muy serios, tenemos que corregirlos para ayer, no hay tiempo”, sentenció.