Por llamadas hechas a través de teléfonos celulares, mandos de la Secretaría de Seguridad Pública federal (SSP) conocieron del despliegue que llevaron a cabo elementos de esa corporación la mañana del 24 de agosto en la zona de Tres Marías, así como lo que pasó después de la balacera en la que fueron agredidos agentes de la CIA y un capitán de la Marina.

 

Autoridades de la PGR revelaron que cuentan con la relación de los números que marcaron los 12 agentes desde sus celulares, que dejan en evidencia que funcionarios superiores adscritos a la División de Seguridad Regional supieron con precisión del despliegue que se llevó a cabo y de sus consecuencias.

 

En total fueron asegurados 12 teléfonos móviles, de los cuales 11 fueron entregados por los agentes involucrados y uno mas fue encontrado en el suelo, a unos metros del sitio donde quedó la camioneta diplomática en la que viajaban los extranjeros, y que recibió 152 disparos.

 

A partir de ahí se llevo a cabo la verificación de más de 60 llamadas hechas, entre las 6:00 y las 17:00 horas del 24 de agosto en cada uno de los aparatos, en las que se confirmaron coincidencias en varios números marcados.

Al ser revisados esos números, se comprobó que pertenecían a mandos de la Policía Federal, entre los que se encuentran los cinco que ahora están acusados de “encubrimiento” y contra los que se giraron ordenes de aprehensión.

Con excepción del inspector general Juan Manuel Pacheco Salgado, que fue detenido y dejado en libertad bajo fianza, la PGR no ha confirmado la identidad de ninguno de los otros cuatro mandos que lograron tramitar amparos antes de que se cumplimentaran las órdenes en su contra.

 

Datos a los que ha tenido acceso 24 HORAS, apuntan a que uno de estos mandos es el Comisario de la Policía Federal en Morelos, Sergio Licona Gómez, mientras que los otros serían inspectores de la corporación adscritos a la misma base territorial.

 

Desde el punto de vista de la PGR, estos funcionarios conocieron ampliamente los motivos del despliegue que se realizó la mañana del 24 de agosto cerca de la zona de Tres Marías, así como las consecuencias que tuvo, pues recibieron llamadas de los involucrados en los hechos.

 

Pese a ello, ocultaron en sus declaraciones detalles relacionados con los vehículos que intervinieron y los uniformes que nos e utilizaron, y además insistieron en la versión del operativo antisecuestro, el cual ha sido descartado por la dependencia.

 

Es decir, el Ministerio Público concluyó que Pacheco Salgado y el resto de los mandos acusados de encubrimiento, ocultaron el móvil de la agresión al vehículo diplomático e información sobre las condiciones del despliegue, que luego fueron aclarados por los mismos policías detenidos en una segunda declaración.

 

Otros involucrados

 

Autoridades de la PGR sostuvieron que el trabajo de investigación relacionado con las llamadas telefónicas que realizaron los agentes involucrados no ha terminado, pues podría haber más mandos de la Policía Federal y en concreto de la División de Seguridad Regional involucrados, y de distintos niveles jerárquicos.

 

En particular, se analizan las llamadas, aproximadamente diez, que realizó el subinspector Uriel Garrido, quien comendaba al grupo de agentes que atacó la camioneta diplomática en la que se encontraban los estadunidenses y el capitán de la Marina.

 

En las declaraciones asentadas en la averiguación previa PGR/DGCAP/ZCB-IV/174-A/2012, Garrido señaló que en todo momento informó a sus superiores del operativo que se llevó a cabo y luego de las consecuencias que se presentaron.

 

24 HORAS publicó ayer que la investigación por estos hechos alcanza al titularidad de la División de Seguridad Regional de la Policía federal, Luis Cárdenas Palomino, quien próximamente será citado a declarar.

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