MADRID. Los expertos que asesoran al presidente catalán Artur Mas en el proceso soberanista de Cataluña creen que, por motivos políticos y económicos, la poderosa región no quedará fuera de la Unión Europea (UE) si logra su independencia de España

 

Para el presidente del Consejo Asesor de la Transición Nacional (CATN), el jurista Carles Viver i Pi Sunyer, “lo más probable” es que el eventual Estado catalán siga formando parte de la UE, porque “lo lógico es no obligar a salir para volver a entrar”.

 

En conferencia de prensa en Barcelona, el presidente del órgano asesor afirmó que en el caso de Cataluña “los argumentos jurídicos pasarán a segundo plano porque se trata de un problema esencialmente político y económico”.

 

El CATN, creado para asesorar al gobierno catalán en el proceso de independencia, presentó un nuevo informe que plantea cuatro posibles escenarios: la permanencia automática de Cataluña en la UE, la adhesión rápida mediante la aplicación de un régimen transitorio al nuevo Estado, un largo proceso ordinario de adhesión y la exclusión total.

 

Según los expertos, tanto el derecho europeo como el internacional no contemplan un caso como el catalán, es decir, la segregación de una parte de un Estado miembro, y que, por lo tanto, no se le puede aplicar el artículo 49 del Tratado de la UE sobre nueva adhesión.

 

Por lo tanto, la relación de Cataluña con el bloque regional dependerá de la “negación política que se abra” en el caso de una secesión, y del “peso y la fuerza persuasiva de los argumentos” en ese proceso, afirmó Viver i Pi Sunyer, quien llegó a ser vicepresidente del Tribunal Constitucional español.

 

El informe apenas hace referencia a la posibilidad de veto de España, “el único problema serio” que encontraron los expertos, ya que “podría persuadir a una parte de la UE a retrasar el reingreso de Cataluña”, aunque no ven posible que lo impida.

 

“El dilema no es si Cataluña acabará formando parte de la Unión, sino cuándo y cómo lo hará”, dijo Viver i Pi Sunyer.

 

El presidente del CATN cree que la exclusión de Cataluña va en contra de los principios fundacionales de la UE, de su ADN, que es “integrar el mayor número de Estados situados en territorio europeo y que comparten los principios fundacionales de la Unión”. Asimismo, supondría dejar sin derechos europeos a 7.5 millones de catalanes que son ciudadanos y esto sería perjudicial desde el punto de vista económico.

 

El vocero del gobierno catalán, Francesc Homs, apuntó que “en términos relativos Cataluña aporta más que Alemania a la economía europea”, y lo “lógico” es que las autoridades quieran que siga formando parte del bloque.

 

El 8 de abril pasado, el Congreso de los Diputados español rechazó de forma contundente transferir competencias a Cataluña para que celebre un referendo sobre su futuro político, tanto por motivos de legalidad como de legitimidad democrática.

 

Tras el rechazo, Mas aseguró que seguirá adelante con su propuesta de celebrar la consulta sobre la independencia de forma legal el próximo 9 de noviembre, pero que, si el gobierno español de Mariano Rajoy se lo impide, convocará elecciones regionales anticipadas pero que tendrán carácter plebiscitario.