Autoridades mexicanas tienen información de que el narcotraficante Rafael Caro Quintero, excarcelado en 2013 gracias a un fallo judicial luego revocado por la Suprema Corte, está intentando una “invasión” del estado de Chihuahua en su disputa por territorios con el cártel de Sinaloa.

 

“Hay posibilidad de una invasión que pudiera tener en el estado de Chihuahua uno de los narcotraficantes más reconocidos, que es este señor Rafael Caro Quintero, del que tenemos información de que pretende venir para acá”, declaró el martes a la prensa el fiscal de Chihuahua, Jorge González.

 

El portavoz de la fiscalía, Eduardo Esparza, dijo hoy a Efe que los indicios a los que se refirió González provienen de trabajos de “inteligencia tanto estatal como federal, en la coordinación que se tiene con el Ejército mexicano”.

 

“Es información de inteligencia que ellos cruzan”, abundó.

 

En sus declaraciones del martes, el fiscal refirió que ha comentado con autoridades federales la aparente intención de Caro Quintero, actualmente prófugo de la justicia, de “ocupar espacios del cártel de Sinaloa, de disputarlos con ellos”.

 

“Esa es la teoría que hoy se tiene con datos de inteligencia y sobre ello estamos trabajando”, expuso.

 

González enfatizó que las autoridades estatales están trabajando para “evitar que nuevamente el estado de Chihuahua se pudiera convertir en una arena para que (grupos criminales) diriman sus controversias”.

 

Indicó que, de acuerdo con los informes, Caro Quintero dirige uno de los grupos que “ha tenido encontronazos” en el estado de Sinaloa con el cártel de Joaquín El Chapo Guzmán, actualmente preso en Ciudad Juárez, Chihuahua, a la espera del desenlace de su proceso de extradición a Estados Unidos.

 

“Hubo en la zona de Badiraguato varios muertos la semana antepasada, de tal suerte que estamos trabajando con anticipación para evitar que nos pudiera tomar por sorpresa”, añadió el fiscal.

 

A mediados de junio pasado, el alcalde de Badiraguato (Sinaloa), Mario Valenzuela, dijo a Efe que más de 150 familias habían abandonado varios poblados del municipio, donde nació el Chapo Guzmán, por temores a choques entre cárteles contrarios.

 

El semanario Río Doce había informado que un grupo armado conformado por unas 150 personas mató a varias personas en esos días y saqueó la casa de Consuelo Loera, madre de Guzmán.| JMS