Argentina rechazó que el tema de la extracción de petróleo en aguas profundas en torno a las islas Malvinas esté detrás de su reclamo sobre la soberanía de dicho territorio, ocupado desde el siglo XIX por el Reino Unido, pero advirtió que los privados que intenten lucrar con los energéticos podrían ir  a prisión.

 

En un encuentro con representantes de medios de comunicación de diez países de América Latina realizada en la Ciudad de México, el embajador Daniel Filmus, titular de Secretaría de Asuntos Relativos a Islas Malvinas, dejó en claro que el reclamo de las islas no es un “asunto comercial” ni está sujeto a una negociación desde ese tipo.

 

Filmus señaló que en diciembre pasado se hicieron reformas en la legislación argentina que incorporaron tipos penales a la explotación ilegal de recursos en territorio argentino, lo que por supuesto incluye el mar territorial en torno a las Malvinas.

 

“Es decir que si cualquier directivo de cualquier empresa que explote o explore hidrocarburos en el mar argentino, y por supuesto el mar de las Malvinas es tan argentino como el Río de la Plata, sin autorización de nuestro gobierno será objeto de la sanción (…) con una orden de captura difícilmente esa persona va a poder andar libremente en los 133 países del mundo que reconocen  la soberanía argentina sobre las islas (entre ellos México)” señaló.

 

Agregó que Argentina, como haría cualquier país, está dispuesto a defender los recursos de cualquier índole en su territorio, aunque aclaró que aún y cuando las islas solo fueran un conjunto de rocas, el reclamo internacional sería el mismo.

 

“Argentina no tiene interés en ese petróleo, vamos a ser sinceros, ese no es objeto de interés para nosotros. Aunque las Malvinas no tuvieran diversidad de nada nosotros las pelearíamos igual, aun así fueran unas rocas en medio del océano. No es ese el punto de problema para la negociación tampoco, no hay negociación comercial. Es un tema de soberanía, de una tierra usurpada militarmente” sentenció.

 

Medio siglo sin diálogo

 

El funcionario argentino recordó que están por cumplirse 50 años de la Resolución 2065 de la Asamblea General de las Naciones Unidas en la cual se reconoció la disputa por la soberanía de las Malvinas (Farkland como las denominan los ingleses)  y se instó a Argentina y Reino Unido a dialogar y resolverlo.

 

Sin embargo hasta ahora, añadió el embajador argentino, los ingleses se han negado a dialogar amparados con el poder de veto con el que cuentan.

 

“Nacíones Unidas no puede hacer nada más porque Inglaterra tiene derecho a veto en el consejo de seguridad. Nosotros Argentina está dentro de los países que pide un nuevo orden mundial. No puede haber 5 naciones que sigan teniendo derecho a veto y no sean igual que el resto. En la Asamblea es donde está la soberanía”, sentenció.

 

Filmus subrayó que el mundo vive desde hace varios siglos un proceso de descolonización por lo cual no resulta lógico que las Malvinas sigan ocupadas con fines exclusivamente, militares por los británicos.

 

“La población en las islas no ha crecido, es gente que fue traída por los ingleses a ellas. Según los propios censos británicos hay en promedio un soldado por cada dos habitantes, debe ser la proporción militar más grande en el planeta. La realidad es que las Malvinas es la base militar del Reino Unido más grande debajo del paralelo 50 (cono sur)” sentenció.

 

En ese contexto el funcionario argentino subrayó que el 50 aniversario de la resolución 2065 de Naciones Unidas es buen momento para que el Reino Unido comience a cumplir con dicha determinación y se sienten a dialogar sobre la isla.  DM