Las altas temperaturas que se registran, como consecuencia del cambio climático, ya están repercutiendo en la salud de las nuevas generaciones.  De acuerdo con un estudio elaborado por el Banco Mundial en Colombia, evidencia que el calor extremo aumenta la posibilidad de los nacimientos prematuros, al afectar la salud también de las futuras madres, aún embarazadas.

 

“Una ola de calor que dure un mes, por ejemplo, puede elevar la posibilidad de nacimientos prematuros, con las consecuencias que eso tiene en el futuro desarrollo de los bebés”, revela el documento Weather Shocks and Health at Birth in Colombia (Eventos climáticos extremos y la salud de los nacimientos en Colombia).

 

Si bien los efectos que encontró el estudio no son de alarma y sus cifras son menores al 1%, no hay que perder de vista que esto por poco que parezca puede incluir a miles de nacimientos.

 

Se reduce en 0.5% la probabilidad de nacer a término y en 0.4 puntos porcentuales los nacimientos de bebés sanos.

 

Lo preocupante, es que el cambio climático hará que haya más y más frecuentes olas de calor, con lo que es factible que los efectos negativos también aumenten.

 

Si bien, los expertos ya habían advertido que los efectos del cambio climático limitarían especialmente a regiones en desarrollo y limitará aspiraciones económicas de muchos países latinoamericanos.

 

Ante la proyección de un aumento de la temperatura promedio del planeta en 4°C para América Latina y el Caribe las consecuencias se enlistan de la siguiente forma: habrá 20% más de sequías, 80% más ciclones tropicales, y desaparecerán los glaciales andinos.

 

¿Cómo afecta el cambio climático a bebés nonatos?

 

Los eventos climáticos extremos pueden afectar la salud al nacimiento de diferentes maneras, particularmente en áreas rurales, dijo Carlos Rodríguez-Castelán, economista del Banco Mundial.

 

“Los choques climáticos extremos tienen un impacto sobre el ingreso real de los hogares, por la fluctuación de los precios o la incertidumbre de si las cosechas serán buenas o malas”, dijo.

 

El clima extremo puede también afectar la salud de los niños porque aumentan los niveles de estrés de las embarazadas de una manera impredecible e inusual.

 

“Un estudio hecho en Kenia muestra que la disminución de apenas un milímetro anual en las lluvias provoca un incremento de 0.9% del nivel de cortisol (la hormona del estrés, que se manifiesta por tensión psicológica o física). Un nivel elevado de esta hormona de manera crónica contribuye al desarrollo de ciertas enfermedades”, señaló.

 

¿Qué eventos afectan más?

 

Depende del país en que radiquen las embarazadas. En el caso de las áreas rurales en Colombia, se encontró que las olas de calor afectan negativamente la salud del recién nacido. Esto sugiere que las mujeres embarazadas no pueden proteger totalmente de una ola de calor a sus hijos que aún no han nacido.

 

“Las horas de calor pueden afectar la probabilidad de nacer a término y de ser un recién nacido saludable. Por ejemplo, estar expuesto a temperaturas más altas del promedio durante por lo menos un mes del embarazo lleva a la reducción de 0.5 puntos porcentuales en la probabilidad de nacer prematuro”, dijo.

 

De acuerdo a un estudio hecho en Estados Unidos, si una mujer embarazada está expuesta a temperatura extremadamente alta durante el segundo o tercer trimestre del embarazo, habrá una reducción de siete a 11 gramos del peso del recién nacido.

 

Según, otra investigación en Brasil, una reducción de 31% en la cantidad de lluvia reduce en 1. gramos el peso al nacer y en 0.6 puntos porcentuales la probabilidad de embarazos a término. Sin embargo, un estudio en las áreas rurales en México no encontró efectos de un exceso de lluvia en la altura y el peso de los niños.

 

 ¿Cómo afecta la salud a largo plazo?

 

Una mala salud al nacer es un importante factor de mala salud en el futuro, además de presentar un menor rendimiento en la escuela e incluso menores ingresos laborales, indicó Rodríguez-Castelán.

 

Unos estudios asocian un menor peso al nacer con una mayor posibilidad de muerte infantil, o posibles enfermedades de pulmón, del corazón, de diabetes tipo II, habilidades cognitivas menores y dificultades de embarazo.

 

GH