Andan nerviosos los sinaloenses. Y es que algunos interesados anticipaban desde hace días que el presidente nacional del PRI, César Camacho, llegaría hoy a Sinaloa a “placear” al ex director de Comunicación Social de Los Pinos, David López Gutiérrez.

 

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Es más, se decía que llegarían juntos, procedentes de Sonora, y que esa sería la señal para que los demás aspirantes priistas a la gubernatura se fueran haciendo a un lado para dejarle el camino libre al amigo de Enrique Peña Nieto.

 

Pero… pero desde el mismísimo PRI advierten que no es del todo precisa la interpretación que están haciendo los culichis.

 

Es cierto, precisan, que Camacho estará hoy en Sinaloa –viene de una gira por Baja California y Sonora–, pero su intención no es “inclinar la balanza” hacia David ni hacia ninguno de los posibles precandidatos.

 

Es más, el líder priista se reunirá con los ocho candidatos a diputados federales, tendrán sesiones de trabajo y se pondrá especial atención a las zonas que ven más difíciles de ganar: el distrito II con cabecera en Los Mochis, el IV, con cabecera en Guasave y el VIII de Mazatlán.

 

No estarán presentes –porque el INE se los prohibió– los actuales diputados y senadores. Los legisladores en activo, al igual que los funcionarios, sólo pueden participar en actividades proselitistas después de las seis de la tarde y en fines de semana.

 

En cuanto a David, habrá que esperar. Si en mes y medio a lo más –en junio– no repunta en las encuestas, quedará descartado de la baraja por la candidatura a la gubernatura.

 

Compañeros de López Gutiérrez comentan que la vara que se ha puesto el propio comunicador para decidir si compite o no es pasar de 50% en conocimiento y una intención de voto que permita ganarle al PAN.

 

De no alcanzar tales cifras declinará su aspiración. ¿Por quién? Eso lo ponderará con el propio Peña. Pero ahí están en la lista el empresario Jesús Vizcarra (aunque él mismo se descarte), su gran amigo Heriberto Galindo, el senador Aarón Irízar; el secretario general de gobierno Gerardo Vargas y la senadora Diva Gastélum.

 

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PANISTAS AL BORDE DE UN ATAQUE DE NERVIOS.- Otros que andan con los nervios de punta, son los blanquiazules en Guadalajara. Y es que su candidato a la alcaldía tapatía, Alfonso Petersen Farah, nomás no le hace ni cosquillas al abanderado de Movimiento Ciudadano, Enrique Alfaro

 

Ante la debacle por venir, el Comité Directivo Municipal emprendió una cacería de brujas y al primero que lanzaron a la hoguera –lo acusan de “alta traición” – es ni más ni menos que el ex gobernador jalisciense Emilio González Márquez.

 

Y de plano piden su expulsión del partido. Dice el resolutivo que dieron a conocer ayer:

 

“Este órgano partidista determina la expulsión definitiva de Emilio González Márquez como militante del PAN, por alta traición al PAN por apoyar de manera directa a Enrique Alfaro en su candidatura a presidente municipal, así como a los candidatos a diputados locales y federales del Partido Movimiento Ciudadano”.

 

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LOS GOBERNADORES MÁS “FALSOS”.- La revista Forbes de México hizo un ejercicio bien interesante. Bajo la pluma de Emmanuel Ameth identificó a los gobernadores con mayor obsesión por la popularidad (o por hacer creer que la tienen).

 

Encontró que tan sólo en sus cuentas de Twitter, uno de cada tres seguidores totales obedece a perfiles “falsos” y a bots (difunden un mismo mensaje en masa).

 

Según su investigación, el gobernador que más recurre a cuentas falsas es el hidalguense José Francisco Olvera, quien tiene presuntamente 160 mil seguidores, pero sólo 27% de ellos es real.

 

En segundo lugar está el jefe de Gobierno del DF, Miguel Ángel Mancera quien tiene 1.42 millones de seguidores, pero de éstos sólo 28% es real. En tercero aparece el de Zacatecas, Miguel Alejandro Alonso Reyes, quien tiene 35 mil seguidores, pero solo 36% corresponde a personas reales (la lista completa la encuentran en la revista).

 

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GEMAS: Obsequio del ex gobernador de Jalisco, Emilio González: ” No es quemando la casa como se construyen triunfos electorales”.