A partir del 4 de febrero, los precios de las gasolinas y el diésel tendrían un nuevo ajuste de entre 6.0 y 8.0%, calculan analistas privados.

 
Considerando el rango más alto, el precio promedio para el litro de Magna en la Ciudad de México pasaría de 16.32 a 17.63 pesos; en el caso de la Premium subiría de 18.20 a 19.65 y el diésel aumentaría de 17.07 a 18.43 pesos por litro.

 
Roberto Galván, economista de Actinver, dijo en entrevista con 24 HORAS que tras la liberalización de los combustibles, se espera una segunda alza de 8%, ya que según la fórmula vigente para la determinación de los topes máximos se consideran los precios internacionales del petróleo, los costos de refinación, del transporte y almacenamiento, el margen comercial de la estación de servicio, los impuestos y el tipo de cambio vigente.

 
Guillermo Aboumrad, director de Estrategias de Mercado de Finamex, comentó en un estudio que el segundo gasolinazo en lo que va de 2017, que también calculó sea de 8.0%, podría tener un efecto importante en la inflación de hasta 40 puntos base.
“Aunque no se ha corregido nuestro pronóstico de inflación de 5.0% para el cierre de año, por las fluctuaciones que puede presentar el precio del petróleo en el año y el precio del dólar, se espera que en la segunda mitad del año se estabilicen esos precios.”

 
Galván explicó que a partir del 4 de febrero se tomará la referencia de la cotización promedio de la semana anterior del mercado texano y a partir del 18 de febrero, el ajuste será diario, situación que tendrá relevancia para el mercado de gasolinas mexicano si se considera que ante la volatilidad del tipo de cambio, el dólar tienda a subir y en consecuencia el precio del combustible.

 
Según el calendario de la Secretaría de Hacienda, los precios de la gasolina cambiarán el 4 de febrero y estarán vigentes hasta el 11 del mismo mes, los precios del 12 de febrero estarán vigentes hasta el 18 de febrero y a partir del sábado 18 de febrero se determinarán de manera diaria.

 
Bajan el peso y la mezcla
Desde el 30 de diciembre pasado, el precio de la mezcla mexicana de crudo de exportación ha bajado 2.03%, de 46.30 a 45.36 dólares por barril. En el mismo lapso el tipo de cambio subió 3.8%, de 20.64 a 21.44 pesos por dólar.