La presión por consolidar a Brownsville, en el estado de Texas , Estados Unidos, como un nuevo centro espacial en Estados Unidos de la mano de Space X, ha llevado al límite las negociaciones de Elon Musk con las autoridades  de esta ciudad, que han accedido a hacer onerosas exenciones y a cambiar las leyes para iniciar la construcción de una nueva sede de exploración espacial.

De acuerdo con Bloomberg, el trabajo de cabildeo del fundador de PayPal y de Tesla Motors con funcionarios locales es intenso, por lo que está a punto de conseguir incentivos financieros de hasta 20 millones de dólares y el cierre de una playa pública para el inicio de los trabajos de la primera plataforma de lanzamiento de cohetes comercial del mundo.

 

Elon Musk, CEO de Space Exploration Technologies Corp. (SpaceX), cuya fortuna se estima en nueve mil 800 millones de dólares, provenientes de sus empresas en el sector tecnológico, es un emprendedor exitoso y un innovador que toma muchos riesgos.

 

Las autoridades de Brownsville sólo esperan que Musk se decida por esta ciudad para que sea la sede de la plataforma para otorgar estos apoyos, en espera de que el proyecto reactive la economía local y disminuya el número de desempleados que suman 6% de su población.

 

“La aprobación de incentivos por parte de las autoridades locales está sujeta a una decisión final por parte de la empresa”, detalla la agencia.

 

“El condado de Cameron, en donde se encuentra la playa, tiene previsto ofrecer exenciones fiscales que podrían salvar SpaceX de pagar dos millones de dólares durante 10 años”, dijo al respecto Carlos Cascos, juez del condado de Cameron.

 

Bloomberg indicó que una persona familiarizada con las negociaciones informó que otro de los incentivos que recibiría la compañía de Musk por parte del Consejo de Desarrollo Económico de Brownsville, serían un fondo de tres millones de dólares para el proyecto.

 

Esta práctica es cada vez más común entre los gobiernos estatales y locales de Estados Unidos, que caen en lo que conocen como “la guerra de las ofertas de empleo”, en la que las autoridades locales ofrecen exenciones tributarias que pueden alcanzar hasta los 70 millones de dólares, con el fin de concursar por proyectos que generen una derrama económica que ayude a los habitantes de la región y disminuya su índice de desempleo.

 

Con el fin de obtener mejores condiciones para el inicio de la estación espacial comercial, SpaceX  envió en el 2011 a un agresivo equipo de cabildeo a negociar con funcionarios estatales y locales de una de las regiones metropolitanas más pobres de la nación.

 

De acuerdo con los testimonios de Gilberto Salinas, vicepresidente ejecutivo del Consejo de Desarrollo Económico de Brownsville y de Tony Martínez, alcalde de este condado, durante las negociaciones, eran constantemente advertidos acerca de que no eran los únicos con los que se sostenían pláticas para el desarrollo de este complejo.

 

Entre las ciudades que se encuentran en espera de un fallo por parte de la empresa de Musk se encuentra Florida y  Georgia, así como Puerto Rico.

 

La competencia es muy fuerte, por ejemplo, Florida tenía 20 millones de dólares disponibles para contratar a empresas relacionadas con el espacio.

 

“Nosotros hemos avanzado en los últimos tres años y hemos hecho todo lo que han pedido de nosotros. Hemos sido competitivos frente a lo que Florida estaba preparando”, dijo el alcalde de Brownsville.