¿Cómo se prepara Nueva Alianza para la discusión del borrador de la Constitución de la CDMX?

 

Estamos trabajando en una agenda de contenidos y estamos realmente preocupados por el contenido de este anteproyecto. Creemos que es algo que va a provocar muchos conflictos. Finalmente es un proyecto totalmente ideológico, es un proyecto contrario a los intereses de la ciudad, va a alienar a la iniciativa privada y favorece a mafias como la del ambulantaje, a la que le entrega el espacio público.

 

Pondrá a la ciudad en una ruta de bancarrota, porque es una Constitución que tienen los peores nichos del Chavismo, que intenta poner subsidios y derechos para todo el mundo, sin tener un mecanismo fiscal para financiarlos y eso va a quebrar las finanzas públicas a la ciudad.

 

¿Qué partes son las que tienen este tinte?

 

Todo lo que tiene que ver con derechos sociales: el derecho a una renta individual, el seguro del desempleo. Eso es exactamente lo que ha pasado en Venezuela, es una Constitución que trata de establecer una especie de utopía comunitaria-indígena en una ciudad como la nuestra, en el siglo XXI. Es absolutamente retrógrado y es muy riesgoso.

 

Tiene un carácter muy débil y decepcionante en lo que respecto a desarrollo urbano, medio ambiente, gestión territorial, manejo del agua, y tiene unos arrebatos ideológicos incomprensibles.

 

¿Faltas en la propuesta del gobierno capitalino?

 

Yo no sé quién hizo el borrador que fue difundido, porque es un texto que pertenece a una izquierda que desconoce los tiempos que vive el país y el mundo. Sólo trata de legitimar las estructura de control corporativo entregándole el espacio público a las mafias.

 

¿Hay algo rescatable?

 

Sí, hay algunas cosas. Una es el sistema de planeación de la ciudad y la coordinación metropolitana entre las alcaldías y los municipios conurbados, todo lo que tiene que ver con impartición de justicia.