NAIROBI. El grupo terrorista nigeriano Boko Haram secuestró a al menos 20 personas que viajaban en un autobús en el norte del vecino Camerún, y asesinó posteriormente al menos a 12 de los pasajeros, informaron hoy medios locales.

 

Según fuentes de seguridad citadas por el diario The News Nigeria, milicianos del grupo islamista radical secuestraron a los pasajeros de un autobús que cubría la ruta entre dos ciudades muy cercanas a la frontera nigeriana el pasado domingo.

 

Tras asesinar a 12 de ellos, los terroristas liberaron al resto de los secuestrados, según afirmó a ese mismo periódico un camerunés cuya mujer estaba entre los pasajeros.

 

Hasta principios de este año, Boko Haram había circunscrito sus atentados a Nigeria, especialmente en los estados septentrionales de Borno, Adamawa y Yobe, pero desde enero ha comenzado una nueva campaña de ataques en los vecinos Camerún, Chad y Níger.

 

La Unión Africana decidió en su última asamblea crear una fuerza regional de 7,500 soldados para hacer frente al avance del grupo yihadista, y Chad ya ha enviado cientos de soldados al norte de Camerún y Nigeria.

 

En respuesta al despliegue de tropas nigerianas, camerunesas y chadianas, el líder de Boko Haram, Abubakar Shekau, publicó el lunes un video en Youtube señalando “la inutilidad” de la fuerza regional.

 

“Vuestra alianza no conseguirá nada. Juntad todas vuestras armas y enfrentaos a nosotros. Os damos la bienvenida”, afirmó Shekau en el vídeo.

 

En árabe, Shekau desafió a los gobiernos africanos: “¿Mandáis 7,000 soldados? ¿Por qué no 70 millones? ¿Sólo 7,000? Por Alá que eso es poco. Podemos enfrentarnos a ellos uno a uno”.

 

De momento, las tropas chadianas han arrebatado a Boko Haram al menos la localidad nigeriana de Gamboru, donde mataron a 250 supuestos miembros de la secta radical, tras dos días de combates en la frontera entre Nigeria y Camerún.

 

En represalia, Boko Haram intensificó sus incursiones en Camerún, en la última de las cuales degolló y asesinó al menos a un centenar de civiles en la localidad camerunesa de Fotokol, fronteriza con Nigeria.

 

Según Human Rights Watch, desde 2009 más de 7,000 civiles han muerto los ataques de la milicia terrorista.  DM