El presidente Enrique Peña Nieto encabezó en Palacio Nacional el festejo por el 206 aniversario de la Independencia de México, noche que fue coronada con el tradicional Grito y el espectáculo de fuegos artificiales en el Zócalo de la Ciudad de México, aunque esta vez no se llevó a cabo la cena de gala.

 

Al evento asistieron alrededor de 600 invitados, de los cuales aproximadamente doscientos eran representantes de los Poderes de la Unión, del Cuerpo Diplomático, de órganos autónomos e integrantes del Gabinete, así como representantes de fuerzas armadas de diversos países.

 

En esta ocasión se invitó a directivos de organizaciones no gubernamentales, rectores de universidades, artesanos, investigadores, defensores del medio ambiente, emprendedores, productores del campo, becarios, profesores, chefs.

 

También asistieron a Palacio Nacional seis derechohabientes del IMSS que recibieron trasplantes de corazón o de riñón, y a miembros destacados de comunidades indígenas.  

 

 

“Esta noche los mexicanos nos unimos para celebrar nuestra Independencia y honrar a los héroes que nos dieron Patria y Libertad” publicó el ejecutivo mexicano momentos antes de cruzar por el Salón Embajadores para recibir el lábaro patrio.

 

 

Poco después la presidencia de la República difundió imágenes de los momentos previos al Grito, justo cuando Enrique Peña Nieto se colocaba la banda presidencial. 

 

En una ceremonia breve, el mandatario mexicano salió al balcón presidencial y luego de honrar la memoria de los héroes nacionales, disfrutó en compañía de su familia