Aún hay 24 órdenes de aprehensión pendientes contra integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), aseguró Gilberto Higuera, subprocurador de Control Regional, Procedimientos penales y amparo de la Procuraduría General de la República (PGR).

 

Ello, luego de que este fin de semana fueran detenidos el secretario general de la Sección 22 de Oaxaca, Rubén Núñez, la madrugada del domingo en la Ciudad de México tras salir de la Asamblea Nacional Representativa (ANR) y Francisco Villalobos, secretario de Organización, capturado en Oaxaca la madrugada del sábado.

 

En entrevista con Ciro Gómez Leyva en Radio Fórmula, Higuera señaló que ya fueron detenidos siete dirigentes de la CNTE, incluido el secretario de finanzas y el tesorero.

 

“Lo estamos haciendo con la mayor responsabilidad y cuidado; con el apoyo de la Policía Federal”, y señaló  que hasta ahora no hay elementos para suponer que hubo irregularidades en la detención de Rubén Núñez.

 

Higuera negó que se trate de presos políticos, pues aseguró que se les sigue por delitos de operaciones con recursos de procedencia ilícita, “que tiene que ver con el manejo, la distribución y transferencia de recursos con el propósito de ocultar su origen”.

 

Explicó que la CNTE lograba convenios para la adquisición y prestación de diversos servicios para sus agremiados a cambio de un porcentaje, a modo de comisión.

 

“Luego se hacían transferencias a las cuentas de la organización sindical que administran tanto el líder como el secretario de finanzas, con la participación de otras personas”, explicó.

 

Si bien no dio los nombres de las empresas con las que operaba la dirigencia de la CNTE, el subprocurador precisó que hasta ahora se sabe de tres firmas que realizaban las transferencias a la organización sindical y explicó que hasta el momento se han demostrado hechos de enero de 2013 a junio de 2015.

 

Este fin de semana, tras el desalojo realizado la madrugada del sábado por policías estatales y federales de las instalaciones del IEEPO, no hubo movilizaciones en la capital oaxaqueña.