El secuestro de menores de edad en México registró un repunte en su incidencia durante julio, luego de que del total de víctimas que registró ese delito a nivel nacional fue de 225, de las cuales más del 10% correspondieron a personas en un rango de edad de entre los 12 y los 17 años. En general, el índice de víctimas se elevó en un 4% de lo reportado en junio, informó la asociación civil Alto al Secuestro.
De acuerdo con su reporte mensual sobre la incidencia del fenómeno de secuestro en el país, la organización presidida por Isabel Miranda de Wallace alertó a la ciudadanía para poner mayor atención al trayecto de los jóvenes y niños, debido a que según sus estadísticas, los estudiantes de nivel básico y medio superior han sido blancos de plagio cuando se dirigen a sus hogares al salir de la escuela, e incluso de niños que son “arrebatados” de sus madres.
“No se trata de cifras sino de vidas y personas, detrás de cada secuestro hay una víctima y una historia de dolor. Si bien es cierto que registramos una aparente disminución (1.1% en julio respecto a junio), ésta es insuficiente dado que no tenemos certeza de que sea una disminución real o es una disminución producto de una errónea clasificación del delito”, acusó la activista.
Como parte del ejercicio que mes con mes realiza la asolación civil, Isabel Wallace detalló que el mes pasado se registraron 176 secuestros con un total de 225 víctimas, siendo el Estado de México la entidad donde se registró el mayor número de plagios, seguida de Tamaulipas, Veracruz, Distrito Federal, Tabasco, Guerrero, Morelos y Zacatecas.
Sobre el recuento de las cifras, Miranda de Wallace reitero que existe una “gran opacidad, inconsistencia y manipulación” de las estadísticas de secuestros en los estados, así como a nivel federal con los registros del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, lo cual impide conocer el tamaño real del problema tanto a nivel local como nacional.
“No dejaremos de insistir en la gran necesidad de transparencia y eficacia en el combate del delito de secuestro, ya que si no conocemos la magnitud del problema tampoco tendremos la solución del problema que no disminuye y mucho menos termina”, advirtió.
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