Después de salir de La Habana, Cuba, hace tres horas, el avión que transporta al papa Francisco aterrizó en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM).

 

Tras su histórico encuentro con el patriarca Kiril, alrededor de las 16:00 horas, el papa abordó su avión que lo traerá a la Ciudad de México.

 

Una hora después, el presidente Enrique Peña Nieto anunció en su Twitter que el avión del santo padre ya sobrevolaba territorio mexicano.

 

 

 

 

“En México miraré a los ojos de María y le suplicaré que no deje de mirarnos con misericordia. A Nuestra Madre confío desde ahora mi viaje”, expresó el sumo pontífice durante el viaje a México.   

 

Se tiene previsto que el pontífice arribe al Hangar Presidencial, en el Aeropuerto Internacional Benito Juárez de la Ciudad de México (AICM) a las 19:30 horas.    

 

Francisco será recibido por el presidente Enrique Peña Nieto, quien estará acompañado por su familia, autoridades civiles y religiosas.    

 

Ese encuentro será breve y no están previstos discursos, porque la ceremonia oficial de bienvenida será mañana sábado 13 de febrero a las 09:30 horas en el Palacio Nacional.    

 

       

 

 

Papa arriba a Cuba para histórico encuentro con líder ruso

 

Horas antes, Francisco aterrizó en La Habana para entrevistarse con el patriarca Kiril, un encuentro histórico que busca abrir una nueva etapa de diálogo entre las Iglesias católica y ortodoxa después de casi mil años de cisma.    

 

La primera reunión entre los primados de las dos Iglesias cristianas desde 1054, que duró un par de horas, tuvo lugar en el mismo aeropuerto José Martí de la capital cubana y, después, firmaron una declaración conjunta.  

 

El avión papal aterrizó en la capital cubana a las 14:00 hora local (18:00 GMT) en una breve escala de unas horas en la isla antes de iniciar su viaje oficial a México, y allí fue recibido a pie de pista por el presidente de Cuba, Raúl Castro.    

 

También le recibieron el cardenal Jaime Ortega, máximo rango en la jerarquía católica de la isla, y el arzobispo de Santiago de Cuba y presidente de la Conferencia de Obispos, Dionisio García.    

 

En la reunión entre Francisco y Kiril, que se celebró a puerta cerrada, se espera que aborden asuntos como la defensa del cristianismo, perseguido en Oriente Medio y el Norte de África frente al avance del yihadismo.    

 

También está previsto que traten otros temas de la agenda global como la guerra en Siria y la crisis de los refugiados; la situación de Ucrania, donde las dos iglesias tienen presencia; o el terrorismo internacional.    

 

 

Papa califica encuentro como un regalo de Dios 

 

 Francisco calificó como “un regalo de Dios” el encuentro que mantendrá con Kiril.     “Hoy es un día de gracia. Es un regalo de Dios este encuentro con el Patriarca Kirill. Recen por nosotros”, publicó el pontífice en su perfil oficial de la red social Twitter.

 

 

Papa Francisco inicia viaje a México

 

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Esta mañana, el papa Francisco partió desde Roma para realizar su primer viaje como pontífice a México, hasta el 18 de febrero, pero antes hará escala en La Habana donde mantendrá una entrevista histórica con el patriarca de la Iglesia ortodoxa rusa, Kiril.

 

Jorge Bergoglio partió en avión a las 07:54 hora local (06:54 GMT) desde el aeropuerto romano de Fiumicino con destino a La Habana, en cuyo aeropuerto se reunirá con Kiril.

 

El encuentro en el aeropuerto José Martí de la capital cubana será el primero celebrado entre los jefes de las Iglesias católica y ortodoxa.

 

Posteriormente, el papa volverá a embarcarse en el avión de Alitalia, para aterrizar horas más tarde en Ciudad de México, donde será recibido por el presidente Enrique Peña Nieto.

 

Bergoglio es el primer papa latinoamericano que visita México y durante casi seis días recorrerá la ciudad de México -, que será su base de operaciones- y seis ciudades de cuatro estados: Estado de México, Chiapas, Michoacán y Chihuahua.

 

Durante su estancia, Francisco pronunciará cinco homilías, un ángelus y siete discursos, y estará rodeado en todo momento de un dispositivo de fuertes medidas de seguridad, con un despliegue de unos trece mil policías federales.  (Con información de EFE)