MORELIA. Christian Emmanuel Oropeza Sosa, asesor de la secretaria ejecutiva del Sistema Estatal de Seguridad Pública, Dolores de los Ángeles Nazares Jerónimo, fue detenido en un operativo de alcoholímetro.

 

Al notificársele la retención de su vehículo por haber dado positivo en la prueba de alcoholemia, comenzó a agredir verbalmente a los efectivos de Policía Michoacán, a los que amedrentó haciendo presunción de su influencia en el interior del gobierno del estado.

 

A las 3 horas, el programa Conduce Sin Alcohol se encontraba instalado en Calzada La Huerta, a la altura del Monumento a Lázaro Cárdenas, con el objetivo de prevenir accidentes automovilísticos, mediante la detección de personas en estado de ebriedad y no aptas para conducir, siendo de este modo que el funcionario del orden estatal fue detenido cuando conducía su coche, tipo Ibiza.

 

Al momento de haber sido abordado por los uniformados, se detectó que tenía aliento alcohólico, por lo que se le pidió se orillara y se sometiera a la prueba de alcoholemia, a lo cual respondió de manera agresiva y faltando al respeto a los oficiales.

 

 

La situación empeoró cuando se le informó que su vehículo sería remitido al corralón por encontrarse en estado inconveniente para conducir. En ese momento, comenzó a hacer alarde de sus influencias y a amenazar al personal de tránsito y movilidad del estado de que iban a ser despedidos uno a uno.

 

No bastando con el acto de irreverencia, Oropeza Sosa se volvió a subir a su vehículo e intentó darse a la fuga, sin embargo, fue detenido nuevamente por los efectivos de seguridad, pero esta vez se le fueron los golpes, a la vez que repartía madres a todos los ahí presentes, entre los que estaban elementos de tránsito y abogados del jurídico de secretaría de seguridad pública.

 

En este momento personas que pasaban por el punto de revisión, grabaron el instante en el que los oficiales le pedían se bajara del vehículo a Oropeza Sosa, mientras que uno de sus acompañantes arremetió contra los oficiales, a los que buscó amedrentar reiterándoles donde trabajaba, para luego pedirle el nombre a uno de los policías de manera amenazante.

 

En el colmo de la situación, cuando iba a ser remitido a barandillas, comenzó a decir que era hijo del Comandante Oropeza, oficial de Policía Municipal de Morelia. (Con información de Quadratin) JMS