La demolición de viviendas severamente dañadas por el terremoto del 7 de septiembre pasado en la localidad mexicana de Juchitán de Zaragoza, en el estado de Oaxaca, arrancó hoy en cuatro zonas.

 

“Tenemos un total de 4.127 casas inhabitables, pero necesitamos que los propietarios otorguen su autorización para que sean demolidas”, dijo a Efe el regidor de Obras Públicas del ayuntamiento, Germán Peralta.

 

Hasta ahora hay 978 solicitudes de demolición de antiguas casas y modernos edificios de hasta tres pisos que resultaron semidestruidos por el movimiento telúrico de magnitud 8,2 en la escala de Richter, que dejó un saldo de 98 muertos en el sur del país.

 

Un total de ocho retroexcavadoras proporcionadas por Caminos y Aeropistas de Oaxaca (CAO), la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y el municipio participan en las labores de demolición.

 

En medio de las nubes de polvo, los camiones tipo volteo transportan los escombros a un terreno del panteón municipal y a los laterales de una carretera al oriente de la ciudad, dijo Fabián Vásquez, regidor de Servicios Municipales, quien admitió que hará falta más espacio.

 

“Hay gente que nos pide el escombro para sus patios, pero es demasiado, hará falta terreno para llevar todo”, agregó.

 

Peralta explicó que un grupo de peritos pasarán por las casas dañadas, a fin de que el propietario del inmueble firme un formato de aceptación para que se proceda a la demolición.

 

Los recorridos se han iniciado principalmente en las zonas más devastadas, dando prioridad a las viviendas, detalló.

 

En una etapa posterior, con el aval del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), se procederá con los edificios públicos e inmuebles catalogados como patrimonio histórico, entre ellos el Palacio Municipal, el templo de San Vicente Ferrer y la Casa de la Cultura.

 

En Asunción Ixtaltepec, el segundo municipio con mayor afectación en la zona del Istmo de Tehuantepec, serán demolidas 1.300 casas.

 

“Todos los que requieran que el municipio les limpie sus predios, únicamente tienen que ir solicitar el apoyo e inmediatamente se dispone de maquinaria y personal para realizarlo”, dijo el alcalde Óscar Toral Ríos.

 

El terremoto del pasado 7 de septiembre, de 8,2 en la escala de Richter y el más potente desde 1932 en México, causó 98 fallecidos; 78 de ellos en el estado de Oaxaca, 16 en Chiapas y 4 en Tabasco.

 

México se encuentra en una de las zonas sísmicas más importantes del mundo, dado que interactúan placas tectónicas como las del Pacífico, Cocos, Norteamérica, Caribe y Rivera, y la mayoría de los sismos se registra en los estados del sur, sobre todo en Guerrero y Oaxaca.

 

caem