Sonora es un estado que en el panorama se ve más fácil que permanezca para el PAN a que lo recupere el PRI. El gobierno de Guillermo Padrés no ha sido para nada una administración de la que el panismo pueda sentirse orgulloso; hay escándalos de corrupción, un gasto desordenado e ineficiente y un estado que se fracturó entre sus dos ciudades más importantes por un conflicto de agua entre familias del norte, Hermosillo, y acaudalados caciques del sur, con Obregón. Pero en medio del caos que ha sido su gobierno, hay algo que le reconocen a Padrés incluso sus adversarios del PRI: el panista sabe operar políticamente y ha preparado su sucesión de manera inteligente.

 

 

El candidato del gobernador es el ex alcalde de Hermosillo, Javier Gándara Magaña, a quien Padrés ha apoyado no sólo para promover fuertemente su imagen, sino para que controle hoy en día al PAN de Sonora. Las encuestas arrojan amplias posibilidades de que Gándara se convierta no sólo en el candidato del panismo, sino en el que puede mantener la gubernatura para los azules con el gobernador detrás de su ya iniciada campaña.

En el PRI tendrán un dilema. Por un lado están las aspiraciones de otro Gándara, Ernesto, el senador priista, también ex alcalde de Hermosillo y quien busca su segundo intento; sólo que, aún con los nexos familiares entre los dos Gándara, los sondeos de popularidad e intención del voto favorecen al panista Javier por encima de su primo priista.

Por otro lado, en el PRI está el factor Manlio Fabio Beltrones, hoy por hoy convertido en jefe político del priismo sonorense. Hay quien piensa que Beltrones tendrá mano en la elección del candidato priista a la gubernatura porque así lo decidirán en Los Pinos donde existe un buen ánimo para dejarle al coordinador de los diputados del tricolor que maneje la elección en su estado.

Y si Manlio lleva mano, entonces su candidata sería una mujer: la senadora Claudia Pavlovich, quien tiene una buena imagen y podría vender el primer discurso de género en un estado donde la política, tanto en la era priista como en la alternancia del PAN, ha estado dominada mayoritariamente por hombres.

 

 

Pavlovich, dicen en el mismo PRI, podría tener buenas posibilidades de enfrentar al PAN no sólo por su condición de mujer, novedosa para la política sonorense, sino por su juventud. El único problema que tendría la senadora -dicen también con cierto sarcasmo algunos priistas- es que si tiene el apoyo de Manlio podría pesarle el récord que trae el ex gobernador con otros candidatos a los que ha impulsado en estados como Guerrero y Baja California: los dos perdieron.

De cualquier modo Sonora será una de las elecciones más interesantes para observar en el 2015, no sólo porque puede significar un termómetro de si el PAN mantiene su tendencia a la recuperación, iniciada en 2013 con su triunfo en Baja California, sino porque también se verá si el PRI de Enrique Peña Nieto tiene la fuerza suficiente para recuperar un estado emblemático para el priismo -tierra de su fundador Plutarco Elías Calles- o si el desgaste de primeros años de gobierno y el costo de las complicadas reformas peñistas le pesarán al viejo partido.

 

NOTAS INDISCRETAS… Lo que empezó como un conflicto entre socios del hotel El Encanto en Acapulco, ha puesto al descubierto un escandaloso caso de fraude que involucra al presunto arquitecto Miguel Aragonés Pardo. Resulta que Aragonés, quien se presentó durante años en México como un reconocido arquitecto, no sólo defraudó a sus socios en ese hotel al realizar un pésimo manejo administrativo y dejar de pagar a los empleados más de cuatro millones de sus sueldos, lo que hizo estallar una huelga que ocasionó el cierre de El Encanto desde el 13 de mayo pasado, sino que además engañó a asociaciones de profesionistas en México y en el extranjero, a universidades privadas en las que dio cátedra de arquitectura, a los jóvenes que estudiaron con él y a todo el mundo de la arquitectura en el que incluso se le concedieron premios y reconocimientos por su trabajo cuando en realidad nunca tuvo el título de arquitecto con el que se ostentaba.

 

 

Según ha denunciado el abogado Xavier Olea, quien representa a los socios defraudados, una consulta en el Registro Público de Profesiones de la SEP arrojó que no existe un título de arquitecto a nombre de Aragonés. En el oficio SEP_DGP/DJ1159/2014 se señala que “en Registro Nacional de Profesiones no se encontró antecedente profesional a favor del c. Miguel Ángel Aragonés Pardo”. El problema es que Aragonés huyó y al parecer se encuentra fuera del país mientras sus socios han iniciado incluso demandas penales porque delegó la administración del Encanto a una operadora de dudosa procedencia, cuyos orígenes están en Apatzingán, Michoacán, la cual manejó un fondo de 15 millones de pesos. Los delitos por los que sus socios acusan a Aragonés podrían sumar 12 años de prisión y el tema provocará incluso preguntas en lugares como la Universidad Anáhuac, donde durante varios años Aragonés impartió el posgrado de Arquitectura sin tener título de arquitecto… Los dados abren semana. Doble Escalera.