La madrugada de este jueves y tras casi 15 horas continúas de debate, el pleno de la Cámara de Diputados aprobó la nueva Ley para Petróleos Mexicanos (Pemex) y Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Los legisladores modificaron el tercer dictamen de leyes secundarias en materia energética e incorporaron la figura de “testigo social” al Consejo de Administración de ambas empresas.
Dichos testigos ciudadanos fungirán como observadores en los procesos de contratación y tendrán la facultad de dar aviso a la Auditoría Interna sobre cualquier irregularidad detectada.
Con 319 cotos a favor, 116 en contra y una abstención el pleno de San Lázaro avaló en lo general y particular el tercer dictamen de las leyes reglamentarias y devolvió el proyecto al Senado
Durante la sesión, legisladores de izquierda llamaron a discutir sobre la corrupción que se registra al interior de la paraestatal; Ricardo Monreal (MC) solicitó a las fracciones del PRI y PAN suspender la votación hasta no tener claro qué se hará con el líder acusado de corrupción, el senador Romero Deschamps, pero la propuesta fue ignorada.
Sin embargo, el grupo priista defendió la iniciativa del presidente Enrique Peña Nieto para transformar el sistema administrativo de las paraestatales como un incentivo para “atajar las prácticas de corrupción”.
“Las nuevas leyes tienen como propósito establecer una nueva estructura corporativa y organizacional que moderniza a Petróleos Mexicanos y a la Comisión Federal de Electricidad. Estos contarán con un régimen especial que incremente su competitividad”, dijo el priista Marco Antonio Bernal.
Resaltó que ambas entidades, a más tardar en dos años, se transformarán como organismos desconcentrados, ya que su operación estará regulada por los nuevos ordenamientos a fin de garantizar su eficacia, eficiencia, honestidad, producción y transparencia.
La mesa directiva declaró en receso la sesión del cuarto extraordinario pasadas las 3:00 horas de este jueves y citaron nuevamente al pleno a las 13:00 horas