A pesar de que los precios del petróleo regresaron a sus niveles de hace cinco meses, el repunte está muy lejos de impulsar a las empresas a correr nuevos riesgos y mantener los ritmos de inversión de años anteriores.

 

Al cierre de noviembre pasado, las cotizaciones de la mezcla mexicana estaban en 34.28 dólares por barril, el WTI en 41.65 y el Brent en 44.40 dólares por tonel.

 

La crisis petrolera ha afectado la deuda y la capacidad de inversión de Pemex, pero la empresa mexicana no es la única que ha recortado su gasto, pues firmas como Shell, de origen anglo-holandés, así como Newpek, filial de Grupo Alfa, están en pleno proceso de recorte.

 

Newpek anunció que detendrá la perforación de pozos de petróleo de shale en Eagle Ford, localidad rica en hidrocarburos, ubicada en Texas, hasta que se recuperen los precios de los hidrocarburos.

 

“Durante el primer trimestre de 2016, las operaciones de Newpek continuaron siendo afectadas por los menores precios del petróleo a lo largo de la industria, que promediaron 33 dólares, una caída de nueve dólares y 16 dólares por barril, en comparación con los promedios del cuarto trimestre del año pasado y el primer trimestre de ese año, respectivamente”, señaló la compañía en su reporte financiero.

 

La filial de Alfa no es la única empresa que ha replanteado sus inversiones en el mediano plazo, pues Shell dejará de invertir mil 500 millones de dólares, después de gastar 49 mil millones de dólares en la compra de BG Group, que se concretó el 15 de febrero pasado, según datos de la consultora noruega, Rystad Energy.

 

El gasto reportado por la empresa inició su tendencia a la baja en 2014, pues al cierre de ese año su inversión real se redujo casi 54%, al destinar 23 mil 899 millones de dólares, mientras que el año pasado destinó 500 millones menos a proyectos productivos, según su informe financiero, al contar desinversiones por 20 mil millones de dólares en esos dos años.

 

Además de la disminución prevista por la consultora, en su reporte de 2015, la empresa advirtió que las desinversiones podrían alcanzar 30 mil millones de dólares entre 2016 y 2018.

 

Otro de los grandes productores mundiales, la estadunidense Chevron, anunció que para este año sus inversiones alcanzarán 26.6 mil millones de dólares, una reducción acumulada de 22% menos que los recursos utilizados durante 2015.

 

Golpe al gasto. La consultora Rystad Energy estimó que para este año las inversiones en el mundo petrolero se ubicarán en 522 mil millones de dólares, mientras que el año pasado se gastaron 595 mil millones, lo que representa una contracción de 22%.