Algo está a la vista de hace un par de meses hacia acá: en importantes medios de comunicación –tanto de radio y televisión como escritos- han dejado de “golpear” a Andrés Manuel López Obrador.

 

Pero no sólo han disminuido, o bajado de tono, las críticas hacia el líder de Morena. Además ha sido requerido, y bienvenido, en espacios normalmente ríspidos para el tabasqueño (incluidos empresarios de abolengo).

 

Diciembre marcó de hecho el regreso -con pisada fuerte- de AMLO a los medios.

 

Tres entrevistas destacan de esta etapa: la de Carlos Loret, en Televisa, el 7 de diciembre; la de Joaquín López-Dóriga, por Radio Fórmula, el 15 del mismo mes; y la de los conductores de La Silla Roja (Enrique Quintana, Leonardo Kourchenko, Alejandro Cacho y Carlos Mota), el 19, en El Financiero-Bloomberg.

 

El nuevo ambiente que ha detectado –y encontrado- López Obrador hacia su persona tiene como trasfondo, por un lado, el alza en su propia popularidad junto con su partido, Morena; y, por otro, la crisis política por la que atraviesa el país y el descrédito y baja popularidad en que ha caído el Presidente de la República, arrastrando consigo al PRI.

 

Escenario al que el periódico Reforma añadió cifras inéditas de su última encuesta: Andrés Manuel ya no sólo es el puntero rumbo a la elección presidencial de 2018 –lo que ya ocurría desde hace meses-, sino que por vez primera, como partido, Morena se monta al primer lugar (27%) en las preferencias electorales, seguido por el PAN (24%), relegando al PRI hasta el tercer lugar (17%).

 

¿Qué indica todo lo anterior? De entrada, que varias cosas de fondo han cambiado:

 

Andrés Manuel ha matizado su discurso frente a los ricos. Se ha mostrado moderado, alegre, dispuesto a perdonar o al menos a no lanzar una cacería de brujas contra sus adversarios políticos.

 

-Y un sector importante de medios y empresarios ha dejado de ver a AMLO como un “demonio” y parecen estar dispuestos a darle una oportunidad al ex candidato presidencial.

 

En los hechos, la orden está dada: “Ya no le peguen al Peje

 

El Chapo, regalo para Trump.- ¡Regalote que le envió el Gobierno mexicano a Donald Trump! en la víspera de su toma de posesión como Presidente de Estados Unidos.

 

Sí, la extradición de Joaquín el Chapo Guzmán.

 

¿Era el momento para extraditarlo? Hay opiniones contradictorias al respecto. Unos piensan que las autoridades mexicanas se apresuraron, pues pudieron haber utilizado la extradición del líder del cártel de Sinaloa como carta de negociación ante los agravios y presiones de Trump.

 

Otros consideran –en sintonía con Luis Videgaray– que este gesto de “buena voluntad” y de “colaboración” de nuestra parte puede atemperar el trato de nuestro vecino del Norte hacia México y hacia nuestros conciudadanos.

 

No tardaremos en saber a quién asiste la razón.

 

GEMAS. Cuando Enrique Peña Nieto asumió la Presidencia de la República, en diciembre de 2012, el dólar se cotizaba en 12 pesos con 87 centavos. Ayer, a unas horas de iniciar la era Trump, el billete verde se vendía en bancos hasta en 22.36 pesos.