El jaloneo estuvo fuerte ayer en la Mesa de Diálogo entre los representantes del gobierno federal y los estudiantes del Instituto Politécnico Nacional (IPN).
Tanto que los reclamos no faltaron y el endurecimiento de posiciones llevó a que se discutiera durante horas y horas un solo punto:
-Que el director general del Poli forme parte de la Comisión Organizadora del Congreso Nacional Politécnico a realizarse.
Los jóvenes rechazaban tal planteamiento.
Por un lado y por otro le daban vueltas al tema exigiendo el nombre de quien será el nuevo director del IPN: ¿Por qué quieren incluirlo (en la Comisión Organizadora) si ustedes lo han excluido de esta mesa durante 54 días?
Del lado de la Secretaría de Educación Pública nadie soltaba prenda. Lo más que llegó a decir Fernando Serrano Migallón fue que en cuanto se concluyeran los acuerdos aparecería ahí mismo el nuevo director.
La temperatura subió. Querían el nombre a como diera lugar: “¡Quién es el director!”, demandaban una y otra vez.
-Acrediten una vocación democrática-, pedía César Becker
-El nuevo director no representa a los estudiantes, nosotros no lo elegimos-, respondían desde el ala estudiantil.
-El Congreso no es patrimonio de una parte del Instituto, por más fundamentales que sean los estudiantes, es de toda la comunidad-, anotaba el doctor Rubén Lara.
-Ese director recibirá línea de arriba. ¡No queremos que le tiren línea!-, alegaba Froylán Jiménez.
-Los que reciben línea son ustedes-, reviró Salvador Malo.
Así siguieron hasta que finalmente a las seis y media de la tarde lograron un acercamiento en las posiciones. Se fueron a un receso. Habrían de volver a suscribir los acuerdos -según prometieron los funcionarios de la SEP- ante la mismísima presencia del nuevo director general.
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NADA EN LO OSCURITO.- Sí, nos reunimos, pero a puertas abiertas y ante los medios de comunicación.
Eso fue lo que le respondió Cuauhtémoc Cárdenas a Carlos Navarrete ante su invitación a dialogar para “valorar” la propuesta del ingeniero de “invitar” a renunciar a toda la dirigencia del PRD.
El ingeniero contó que habló por teléfono con Navarrete (actual presidente del partido) antier por la mañana y que en esa conversación le planteó que podían reunirse a partir de las siete de la noche de ese mismo día.
Sólo que, le indicó, quería tener ese encuentro “frente a representantes de medios de comunicación, para que todo quedara transparente ante la opinión pública y sobre todo frente a los militantes del partido”.
Y qué creen. Que Navarrete ya aceptó. Será el próximo martes, a las 12 horas, en la sede del PRD.
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YO NO LO SUSPENDÍ.- El talante de la respuesta del general Salvador Cienfuegos fue tal que a nadie le quedó duda de su enojo:
“Lo suspendieron… ¡Yo no lo suspendí!”-, soltó a su paso por el Hospital Militar.
Se refería a la ceremonia que tenían preparada para hoy en el Zócalo -efemérides del inicio de la Revolución Mexicana- y durante la cual, como es costumbre, recibirían sus ascensos integrantes de las Fuerzas Armadas.
“Es para evitar provocaciones o un posible enfrentamiento” ante las movilizaciones que habrá por los desaparecidos de Ayotzinapa, comentarían en la Secretaría de Gobernación.
Aunque parecía lo más prudente ante la situación, la decisión no dejó de molestar al general-secretario. Y es que para los militares eso implicaba “replegar al Ejército”. Es decir, dejar el campo libre a los adversarios.
Y vaya que se ve complicado el día para hoy. Por lo que toca al DF se esperan varias marchas rumbo a la Plaza de la Constitución y se han anunciado bloqueos en torno al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, así como en el Circuito, Viaducto y algunas otras arterias.
En distintas partes del país se ha convocado también a bloqueo de carreteras, toma de casetas, cierres de comercios.
Todo, en protesta por los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos.
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GEMAS: Obsequio del senador Emilio Gamboa: “Me parece que la señora Angélica Rivera de Peña salió con gran valor a defender su dignidad y la de sus hijas”.