BERLÍN. El ministro de Economía alemán, Sigmar Gabriel, descartó hoy que el escándalo de las emisiones del grupo Volkswagen vaya a tener efectos negativos duraderos sobre el conjunto de la economía de Alemania.

 

“Estoy convencido de que los problemas de Volkswagen no van a tener un efecto duradero en la economía alemana”, aseguró el también vicecanciller y presidente del Partido Socialdemócrata (SPD) durante su participación en el foro “Alianza por el futuro de la industria”.

 

El encuentro, en el que participaron también representantes del empresariado y los sindicatos, recogió también este asunto en su declaración conjunta final.

 

“La industria alemana es calidad y seguridad, tecnología punta y protección del consumidor y el medioambiente. Estas son las características de los productos ‘Made in Germany’, indica el texto.

 

También agrega que “esta posición debe reafirmarse a diario. El caso Volkswagen muestra lo rápido que se pierde la confianza. Ahora se trata de recuperar la confianza perdida”.

 

Gabriel indicó asimismo que considera necesario mejorar las pruebas de emisiones que se realizan a los vehículos para que reflejen las condiciones de conducción reales.

 

El presidente de la Federación de la Industria Alemana (BDI), Ulrich Grillo, aseguró que “el caso Volkswagen no va a llevar a que Alemania como economía sea dañada”, pero exigió a la vez “transparencia” y rapidez en el esclarecimiento de lo ocurrido.

 

“El nombre de la industria alemana en todo el mundo debe permanecer inmaculado”, afirmó Grillo.

 

Gabriel tiene previsto presentar mañana la actualización de las previsiones macroeconómicas del Gobierno alemán ante el Bundestag (cámara baja) y luego en una rueda de prensa.

 

En su último pronóstico, de abril, Berlín estimó que la economía alemana avanzaría este año el 1,8 %, gracias al consumo privado, aunque ahora los expertos apuntan riesgos bajistas por el parón de los emergentes y el escándalo de Volkswagen.