Este fin de semana, nueve periodistas fueron agredidos mientras realizaban su trabajo en Guerrero, según documentó la organización Artículo 19; cinco de ellos ayer en un enfrentamiento en Chilpancingo, y otros cuatro el sábado, cuando fueron retenidos por más de dos horas.

 

Después de ser liberado por presuntos integrantes del Movimiento Popular Guerrerense (MPG), Miguel Mata Mata, director del periódico La Verdad de Guerrero, lamentó en entrevista con 24 HORAS que cada vez sea más difícil en ese estado ejercer el periodismo.

 

“Nosotros nos defendíamos del crimen organizado y ahora resulta que a veces el gobierno nos agrede, el narco y ahora también estos señores que son supuestamente maestros, nos humillaron bien feo. Nos estaban amenazando con llevarnos a una cárcel clandestina que ellos tienen y que si veían por ahí a algún político de los que estaban buscando, nos iban a llevar a hacer trabajo comunitario”, dijo.

 

De acuerdo con Mata Mata, el sábado, el Club de Periodistas que preside realizaba su ceremonia anual de entrega de reconocimientos en Tlapa. Asistieron cerca de 50 reporteros de todo el estado acompañados por sus familiares.

 

Cuando la ceremonia ya había empezado, un grupo de personas embozadas, se presentaron como integrantes del MPG, cerraron las puertas del salón (con 120 personas dentro, entre reporteros y familiares) y exigieron la salida de los representantes del gobierno local que presuntamente estaban ahí.

 

Los embozados acordaron liberar el salón a cambio de que saliera una comisión de diálogo, misma que quedó integrada por cuatro periodistas: Miguel Ángel Mata Mata, director de La verdad de Guerrero (Acapulco); Silvia Borja Arteaga, periodista La verdad de Guerrero (Acapulco); Julio Ayala Cano, periodista de El Diario de Guerrero (Chilpancingo); Brenda Nava Mancilla, directora del periódico Noticias de la Montaña (Chilpancingo).

 

Según la versión de Miguel Mata, los periodistas fueron conducidos a las instalaciones del Ayuntamiento (mismas que están tomadas por integrantes de la Coordinadora de Trabajadores de la Educación de Guerrero); en el camino, integrantes del MPG que los esperaban afuera los golpearon, jalonearon e insultaron.

 

Al final, los reporteros fueron obligados a enfrentar a un grupo de “cerca de 500 personas” que los esperaban fuera del edificio gubernamental; tuvieron que entregar 3 mil pesos a los miembros del MPG que los tenían retenidos, a pedirles perdón a ellos y a las personas que estaban observando por la forma en que realizan su trabajo y a desmentir que habían sido secuestrados.

 

Artículo 19 documenta este caso y el de otros cuatro reporteros agredidos durante la cobertura de hechos violentos en Chilpancingo. A través de su encargada de prensa, Lucía Vergara, la organización lamentó que ya no existan condiciones para ejercer el trabajo periodístico en Guerrero.

 

También recomendó a las empresas periodísticas instaurar protocolos de cobertura y dar capacitación y equipo a sus reporteros y fotoperiodistas para que puedan protegerse y no sólo en Guerrero, donde la situación es crítica en estos momentos, sino en todo el país e incluso en el Distrito Federal para la cobertura de marchas y manifestaciones.

 

Periodistas agredidos

 

En Chilpancingo:

 

Alejandrino González, fotógrafo de la agencia AP

 

Carlos Alberto Ojeda Torres, reportero de la estación Radio Generación

 

Jorge Dan, fotógrafo de la agencia Reuters

 

Ernesto Cruz, colaborador, Revolución 3.0

 

Ángel Huerta, reportero de Radio Zapote

 

En Tlapa:

 

Miguel Ángel Mata Mata, director de La verdad de Guerrero (Acapulco)

 

Silvia Borja Arteaga, periodista La verdad de Guerrero (Acapulco)

 

Julio Ayala Cano, periodista de El Diario de Guerrero (Chilpancingo)

 

Brenda Nava Mancilla, directora del periódico Noticias de la Montaña (Chilpancingo)