WASHINGTON. Un miembro de la unidad de Operaciones Especiales de Estados Unidos y un miembro de la Agencia Central de Inteligencia de la embajada de Estados Unidos en Yemen, dispararon y mataron a dos civiles yemeníes que intentaron secuestrarles cuando se encontraban en una peluquería de Saná hace, según han reconocido este viernes las autoridades estadunidenses.

 

Los hechos tuvieron lugar el pasado 24 de abril, aunque se desconocen los detalles de lo sucedido. Varios oficiales han explicado que los dos funcionarios se limitaban a cortarse el pelo en una peluquería de un distrito lujoso frecuentado por extranjeros, por lo que se descartaría que estuvieran participando en una operación secreta, según ha informado el periódico The New York Times, que citó a funcionarios no identificados.

 

La vocera del Departamento de Estado, Marie Harf indicó que tras el incidente, pocos días después, los estadunidenses partieron de Yemen con la aprobación del gobierno de ese país, según el periódico.

 

Harf, que realizó estas declaraciones a través de correo electrónico en respuesta a las preguntas del diario, precisó que los dos individuos armados murieron y que los dos trabajadores implicados en el suceso no se encuentran en Yemen en la actualidad.

 

Por el momento se desconoce si los dos funcionarios violaron los protocolos de seguridad estadounidenses al visitar la peluquería, aparentemente solos. En países considerados conflictivos, como Yemen y Pakistán, el personal diplomático estadunidense tiene restringido sus movimientos fuera de los muros de la embajada y normalmente sale acompañado por personal de seguridad.

 

A principios de semana, la embajada de Estados Unidos en Yemen, ubicada en Saná, cerró temporalmente sus puertas debido a ataques contra occidentales.

 

Estados Unidos efectúa en Yemen una intensa campaña de ataques con aviones teledirigidos contra el grupo al-Qaeda en la Península Arábiga. Este mes, el gobierno yemení lanzó una ofensiva contra el grupo extremista, en tanto que se ha incrementado la violencia en el país.

 

El viernes pasado, individuos armados que se cree eran extremistas de al-Qaeda, emboscaron la caravana en la que viajaba el ministro de Defensa de Yemen en la región de Mahfad, dijeron las autoridades. Fracasó el intento de asesinato contra el funcionario.

 

Horas después, un retén de seguridad cerca del palacio presidencial en Saná fue atacado y perdieron la vida al menos dos policías.