A unos cuantos meses de haber asumido el cargo, los hidalguenses parecen haber comprobado varias cositas de su gobernador, Omar Fayad. Una: que “no le sube el agua al tinaco”; dos: que no tiene lo que dijo Nelson Vargas; tres: que es misógino… y además estulto. Sugerir a las mujeres indígenas de su estado que “duerman con ropa porque producen muchos chamacos” confirma la percepción que tienen de él sus “desgobernados”.

 

Las estulticias que dijo Fayad nos hicieron recordar a Rosario Robles Berlanga, quien como secretaria de Desarrollo Social tuvo la ocurrencia (mayo de 2014) de pedirles a las mujeres indígenas que ya no produjeran “chilpayates”, porque a la que tuviera más de tres hijos les iba a cancelar el apoyo del programa Oportunidades; “la procreación se está viendo como forma de que ingrese más dinero al hogar”, les reiteró la señora a esas mujeres que pertenecen al grupo de los más pobres de los pobres, declaración que la hizo merecedora al título de “Chayotzin”.

 

No deberían asombrarse los hidalguenses, ni la opinión pública, por las estulticias que dice Omar Fayad porque son frecuentes, tanto como sus tropezones, apuntan los observadores. Uno de tantos fue cuando presentó, como presidente de la Comisión de Seguridad Pública del Senado de la República, su iniciativa llamada “Ley para Prevenir y Sancionar los Delitos Informáticos”, calificada por los internautas como la “cibermordaza”.

 

Ante las críticas, comentarios y varios ataques cibernéticos, Fayad se vio en la penosa necesidad de recular y retirar su propuesta, aunque tuvo el cinismo de afirmar: “Quemamos el primer texto, no hay problema, podemos construir una iniciativa que responda al problema y que no deje la interpretación de que queremos coartar la libertad de expresión… lo que queremos es combatir un fenómeno que lastima a la sociedad y no dañar derechos que se han conseguido (tras muchos años de esfuerzo)…”. “Ofrezco todas las opciones: corregir, quitar, aumentar o comenzar de cero una nueva redacción.

 

Si lo que quieren es que la queme, la quemamos, pero que no quede en la conciencia social y en las redes que quisimos hacer un intento de mordaza, eso jamás lo haría”. Finalmente, el “quemado” resultó ser él.

 

Pero volviendo a las sugerencias del gobernador de Hidalgo a las mujeres indígenas de su estado, llama la atención de los observadores que la señora Nuvia Mayorga Delgado, directora general de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, no haya salido en defensa de ellas. Lo menos que debería hacer Nuvia –si no es que anda en París comprándose huaraches Christian Dior– es organizarlas, llevarlas al estadio de los Tuzos del Pachuca para que le griten a Fayad… lo que quieran por esas palabras ofensivas, humillantes, misóginas, proponen aquéllos.

 

¡Pobres mujeres hidalguenses! Y pensar que van a tener que aguantar a su “gober” seis años.

 

Agenda previa

 

Para el “futuro del bienestar de los mexicanos” –Luis Robles Miaja, presidente de los banqueros dixit–, sobre todo los que utilizan productos financieros, el Banco de México incrementó su tasa de referencia 50 puntos base para llevarla a 5.75% anual. Según el presidente de la Condusef, este incremento encarecerá hasta 50% anual el costo de más de mil productos crediticios que los usuarios han contratado a tasa variable. Pero lo peor está por venir, pues el próximo año podría haber tres aumentitos de la misma dimensión a la susodicha tasa. ¡Otro excelente año para los usureros, perdón, banqueros!