El gobierno de Guerrero y el Movimiento Popular Guerrerense (MPG) firmaron 41 acuerdos, con lo que los inconformes permitirán el desarrollo de elecciones el próximo 7 de junio.

 

Desde el 11 de mayo, 24 HORAS dio a conocer que Rogelio Ortega, gobernador de la entidad, y líderes del MPG, entre los que se encuentran dirigentes de policías comunitarias, magisterio disidente, normalistas, familiares de los 43 estudiantes desaparecidos de Iguala, así como organizaciones civiles y campesinas, abrieron el diálogo para un acuerdo de paz que permita el desarrollo de los comicios luego de siete meses de intensas protestas.

 

Los acuerdos pretenden pacificar a la entidad y atajar la polarización social. Y entre estos se encuentra desde la construcción de un monumento a los 43 alumnos de Ayotzinapa, gestionar la liberación de la líder de las policías comunitarias, Nestora Salgado hasta la edificación de un centro de atención al Frente Popular.

 

La firma es el primer paso para que cesen las protestas y ataques a edificios públicos, y con ello, existan las condiciones para llevar a cabo la jornada electoral del próximo 7 de junio.

 

Desde finales de septiembre de 2014 tras la tragedia de Iguala, en Guerrero se conformó el Movimiento Popular Guerrerense, que además de radicalizarse sus protestas con la quema de edificios y automóviles del gobierno, abanderó el boicot de las elecciones de 2015 como una de sus principales objetivos.

 

En la entidad se elegirá gobernador, 81 alcaldes, más de 40 legisladores locales y diputados federales y a 29 días de la jornada electoral, además de las protestas, la violencia ha impactado a los comicios pues dos aspirantes fueron asesinados y uno más amedrentado por un comando armado.

 

Focalizan amenaza

 

En una reunión con los 10 partidos políticos, el consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova, aseguró que la situación de inseguridad y los focos rojos en Guerrero se reducen a los municipios de Tlapa de Comonfort y Tixtla.

 

De acuerdo con José Carlos Ramírez Marín, representante del PRI ante el INE, dijo que en “Guerrero afortunadamente vemos cómo las zonas de conflicto se concentran prácticamente a dos regiones, así se informó, y cómo se ha ido  normalizando todo lo demás. Estamos hablando de Tixtla y Tlapa”.