Respaldado con más de 24 millones de votos, Andrés Manuel López Obrador comenzó a ejercer ese poder que le dieron los mexicanos el 1 de julio. No hubo que esperar, y él convocó al presidente Enrique Peña Nieto en el Palacio Nacional a una reunión, a dos días de la elección y antes de que cerrara el PREP. Para qué detenerse en formalismos, como aguardar la constancia de mayoría. A diferencia de ésta, otros encuentros similares se han dado en Los Pinos, pero él decidió cambiar el lugar y hasta romper protocolos de seguridad del recinto. Y con altura de miras, Peña Nieto no sólo aceptó abrirle las puertas de Palacio, sino que puso a su disposición y su equipo toda la información del presupuesto, el TLCAN, el nuevo aeropuerto y contratos de Pemex; incluso lo invitó a la cumbre de la APEC… ¿Lo llevará en el avión presidencial?… Aunque el vocero del morenista asegura que se irán juntos si el Jefe del Ejecutivo viaja en línea comercial. ¿Será? 

 

El Estado Mayor: ¿lejos de AMLO?

En lo que respecta a la seguridad del futuro Presidente de la República, aún no está claro si el Estado Mayor Presidencial se encargará de dicha labor. Todavía no hay nada. Aunque AMLO ya reconoció que se encuentra analizando si acepta o no este asunto que muchos dicen que es un tema de seguridad nacional, más que de una persona. ¿Será?

 

Fuera talentos

En los todavía increíbles comicios del domingo, la ola morenista dejó fuera del Senado, al menos, a tres talentos en los que estaban depositadas muchas expectativas de la ciudadanía y en los que descansa a partir de ahora una esperanza de oposición aún por fuera de la función pública. Nos referimos, por supuesto, a los candidatos independientes Manuel Clouthier, de Sinaloa, y Pedro Kumamoto, por Jalisco, así como a la priista tamaulipeca Yahleel Abdala. El primero, identificado como el principal heredero de las ideas progresistas de su padre, Maquío; mientras que los otros son considerados por la prestigiada revista Forbes como dos de las promesas con mayor potencial de la política mexicana. 

 

Tema incómodo

Al interior del gobierno capitalino flota un tema que aún causa escozor: la Línea 12 del Metro, pues su mantenimiento anual será cada vez mayor, y ahora que se preparan las reuniones de transición cabe una pregunta: ¿la virtual ganadora de la Jefatura de Gobierno, Claudia Sheinbaum, someterá a una revisión mayor las irregularidades que se cometieron en el gobierno de Marcelo Ebrard, y que han provocado que cada año el STC