FOTO: ESPECIAL La obra más famosa de George Orwell se compara continuamente con el mundo contemporáneo, de las redes sociales y las denuncias sobre los gobiernos espías hechas por Julian Assange y Edward Snowden  

El gobierno controla cada uno de los movimientos de sus ciudadanos. El trabajo de Winston Smith es reescribir la historia para adecuarla según lo que el partido considera la versión oficial de los hechos, hasta que decide replantearse la falsedad que hay detrás de ello. Esa era la premisa de 1984, la novela escrita por George Orwell en el año de 1949.

Descrito como uno de los libros más representativos de la ficción distópica, subgénero de la ciencia ficción que plantea una sociedad futura donde los gobiernos privan de cualquier libertad a los individuos, George Orwell trazó en 1984 diversos conceptos para criticar los sistemas totalitarios, entre ellos “El Gran Hermano”, “La Policía del Pensamiento”, y el “Ministerio de la Verdad”.

La novela también es escenario para cuestionar el poder de la autoridad para espiar a sus ciudadanos y controlar sus pensamientos, así como la manipulación de la información a través de la creación de un nuevo idioma, “neolengua” en la novela, que evita las ideas contrarias y reduce el significado de las palabras. En la historia, la neolengua sustituiría a la vieja lengua.

La obra más famosa de George Orwell se compara continuamente con el mundo contemporáneo, de las redes sociales y las denuncias sobre los gobiernos espías hechas por Julian Assange y Edward Snowden. En 2017, se dispararon las ventas del libro en Estados Unidos, tras el arribo de Donald Trump a la presidencia.

Rebelión en la granja, es otra de sus obras literarias más conocidas. En la novela, una fábula con tono satírico, hace una crítica el estalinismo. La pluma de Orwell también destacó en el periodismo y el ensayo literario, al dejar reportajes, recomendaciones para los escritores y diversas perspectivas sobre autores como Charles Dickens, Rudyard Kipling y León Tolstói.

 

JNO