Foto: EFE Preferido. El magnate se resiste a criticar a Rusia, mientras cuestiona la investigación del fiscal Robert Mueller  

Lejos de “Hacer Grande a América de Nuevo” como prometió en campaña y discursos, en poco más de un año en el poder, Donald Trump debilitó, dividió, aisló, neutralizó a su país en el escenario internacional y lo hizo más vulnerable, dicen expertos.

En lugar de “históricos logros y grandes avances”, mínimos o inexistentes, que promueve la Casa Blanca, Estados Unidos vive momentos de temor e incertidumbre tras la difusión de alarmantes reportes del Departamento de Seguridad Interna, cada vez más ataques cibernéticos rusos a la infraestructura crítica, como la red eléctrica, plantas nucleares, de abastecimiento de agua, aviación y otras instalaciones, que pueden encender o apagar a su antojo, reveló Robert Lee, CEO de la empresa de seguridad Cibernética Dragos.

“Mientras descarga todo su coraje contra norteamericanos que lo critican o quienes investigan la posible colusión de Rusia con su equipo de campaña, el presidente Trump es incapaz de hablar mal de Rusia, condenar esos ataques, la interferencia Rusa en la elección presidencial” opinan legisladores demócratas y expertos.

Tras el intento de asesinato de Sergei Skripal, de 66 años y su hija Yulia, de 33, con armas químicas en Londres, Donald Trump se resistió a condenar al gobierno ruso, mientras Rex Tillerson señaló a Rusia como “una irresponsable fuerza de desestabilización en el mundo, actuando con franco desafío a la soberanía de otros estados y la vida de otros ciudadanos”. En cuestión de horas, Trump lo despidió.

Mientras Trump trata de marcar distancia de Moscú evitando criticarlos o atacarlos, la periodista rusa Olga Skabeeva destacó que Tillerson apoyó a Theresa May en su acusación contra Rusia y Trump “inmediatamente lo despidió” y exclamó: “Trump es nuestro”.

La Casa Blanca condenó el intento de asesinato de los rusos en Londres, pero no mencionó a Rusia. Igual que Trump impidió la implementación de sanciones económicas a 19 personajes del gobierno de Moscú durante casi un año.

“Los rusos podrían estar preparando nuevos ataques a la elección de medio término (en noviembre) o en caso extremo, a la infraestructura crítica” dice el congresista David Schiff, demócrata de más alto rango en el Comité de Inteligencia de la Cámara Baja.

Trump enfrenta un creciente caos en pistas múltiples, por incapacidad, división y confrontación de su equipo, que resultó en remoción o dimisión de 23 funcionarios de alto nivel a los que se suman Rex Tillerson, Secretario de Estado, y Gary Kohn, principal asesor económico, por diferencias sobre Rusia y las tarifas al acero y aluminio.

A ello se suman desacuerdos con otros funcionarios como el General HR Mc Master, asesor de Seguridad Nacional; el Jefe de Gabinete John Kelly; y el Procurador Jeff Sessions; además de escándalos de los secretarios David Shulkin de Veteranos, Ryan Zinkel del Interior, Scott Pruit de EPA (que podría nombrar Procurador), Ben Carson, de Vivienda por sumas de dinero en viajes, muebles o teléfonos.

Su hija Ivanka y su yerno Jared Kushner que no lograron el visto bueno del Servicio Secreto para tener acceso a información clasificada también están en la lista.

El riesgo del juicio político

Trump enfrenta el desafío de mantener -contra toda lógica- la mayoría republicana en el Congreso, para poder continuar su mandato, ya que si los demócratas recuperan la mayoría, podría ser llevado a juicio político por una gran cantidad de argumentos.

La primera prueba de la elección intermedia en noviembre, para renovar toda la Cámara Baja del Congreso y un tercio del Senado ya fue amarga para su partido.

En la elección especial del Distrito 18 de Pensilvania que fue vista como referéndum a su gestión en un estado en que gano con ventaja del 20%, el demócrata Connor Lamb resultó victorioso, lo que se espera sea un preludio de noviembre.

Este fin de semana Trump despojó a Andrew McCabe, Subdirector del FBI, de su jubilación a sólo 24 horas de que se retirara, quitándole la pensión y beneficios por 24 años de servicio, lo que festejó en varios tuits.

McCabe dijo que su despido y ataques, tienen como propósito desprestigiarlo y demeritar su testimonio en la investigación sobre Rusia y anunció que como James Comey, también él escribió memorándums con información de sus encuentros con Trump.

“Andrew McCabe DESPEDIDO, un gran día para hombres y mujeres del FBI, un gran día para la Democracia. El devoto James Comey era su jefe e hizo a McCabe verse como niño del coro. Él sabía de todas las mentiras y corrupción en los más altos niveles del FBI” escribió Trump en el primero. Le siguieron otros, criticando la investigación de Robert Mueller, Fiscal Especial sobre la interferencia rusa en la elección Presidencial.

A lo que James Comey, ex director del FBI le respondió:

“Señor Presidente, el Pueblo Americano leerá mi historia muy pronto y ellos podrán juzgar por sí mismos quién es honorable y quién no …”

Sin entender o aceptar que su decisión de despedir a Comey, de la dirección del FBI dio vida al Fiscal Mueller, con quien debe entrevistarse para dar testimonio, lo que tiene nerviosos a sus abogados, Trump escribió:

“La Investigación de Mueller nunca debió comenzar, porque no hubo colusión ni hubo crimen. Eso inició con base a actividades fraudulentas y el falso Dossier pagado por la ‘corrupta’ Hillary Clinton y el DNC (Partido Demócrata) e inadecuadamente usado en una corte de FISA (Corte de Vigilancia para el Extranjero) para vigilar mi campaña: Cacería de Brujas.”

Disgustado por el descarado engaño de Trump a quienes lo siguen en Twitter, John Brennan, ex-asesor Nacional de Seguridad de la Casa Blanca y ex Director de la CIA, tuvo fuertes acusaciones para Trump.

“Cuando tu venalidad en toda su extensión, tu torpeza moral y corrupción política sean más conocidas, ocuparás el papel que te corresponde en el basurero de la historia, como un demagogo desgraciado. Podrás tomar como chivo expiatorio a Andy McCabe, pero no destruirás a Estados Unidos, Estados Unidos triunfara sobre ti”.

Los rabiosos ataques de Trump a través de Twitter, que en opinión de muchos, lo autoincriminan en posible obstrucción de la justicia y la eventual colusión que trata de ocultar, alcanzaron a Robert Mueller, insistiendo en que la investigación “es una cacería de brujas”.

John Dowd, abogado de Trump llamó al subprocurador Rod Rosenstein pidiendo despedir a Mueller y cerrar la investigación que se extendió a todos los negocios de Trump desde 2015, lo que generó una rápida movilización de legisladores republicanos y demócratas en el Congreso, que exigieron respetar a Mueller y emitir alguna resolución para proteger su trabajo, apoyada por todos, excepto el liderazgo que apoya a Trump.

“Mueller ha servido al país con honestidad y con integridad, es crítico que se le permita completar la compleja investigación sobre la interferencia en la elección presidencial de 2016, que no fue impedida” dijo el senador republicano por Arizona y ex candidato presidencial John McCain.

El líder de la minoría demócrata en el Senado, Dick Durbin, y el influyente senador republicano Lindsey Graham, de Carolina del Sur, advirtieron que “si Trump despide a Mueller creará una crisis constitucional que marcará el inicio del fin de su Presidencia”.

Mientras millones en Estados Unidos esperan la publicación en días, del libro “Una Lealtad Superior: Verdad, Mentiras y Liderazgo” que describe la experiencia de Comey con Trump, cuyas ventas anticipadas lo hacen ya un best seller, Trump enfrenta muchos otros problemas.

En 13 meses de mandato y sólo un par de acciones legislativas, Trump neutralizó el liderazgo mundial de EU en la protección del medio ambiente, la promoción de la democracia, el respeto a los derechos humanos y laborales, lo confrontó con aliados tradicionales y lo aisló de la escena internacional, mientras durante casi un año impidió la implementación de sanciones económicas a 19 integrantes de la cúpula del Kremlin, aprobadas masivamente por el Congreso en agosto de 2017.

JNO