Foto: EFE Trump, quien ofrece la ciudadanía a cambio del muro, culpa a los demócratas  

Miles de dreamers, simpatizantes, ONG y los fiscales fiscales generales de California, Maine y Maryland urgieron al Congreso de EU a definir una acción legislativa para regularizar la situación de 690 mil jóvenes indocumentados conocidos como dreamers.

En septiembre de 2017, el Gobierno de Donald Trump anunció la cancelación del Programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA) y estableció un plazo de seis meses, que se cumplió ayer, para que el Congreso aprobara una medida que abordara este tema.

En este periodo, el Congreso no llegó a ningún acuerdo al respecto, debido en parte a las presiones de Trump para que la ley incluyera sus prioridades migratorias, incluidos fondos para construir su deseado muro en la frontera de México, aunque varias demandas lograron que dos jueces federales ordenaran que DACA siga vivo hasta que haya un fallo judicial definitivo.

Sin embargo. los dreamers viven en la incertudumbre pues desconocen hasta cuándo seguirá vigente su permiso que les permite estudiar y trabajar.

“No puedo decir que las decisiones de las cortes han sido algo malo, pero le restó urgencia al Congreso de resolver este problema y nos vuelve a dejar en el limbo”, asegura Angélica Villalobos, madre de cinco hijos que vive en Oklahoma y es beneficiaria de DACA.

La mayor preocupación de la activista, con permiso de residencia y trabajo hasta 2019, recae en aquellos que no han podido renovar el DACA y podrían estar en la mira de las autoridades de Inmigración.

El Gobierno ha reiterado que solo los jóvenes que tienen aprobada la renovación están protegidos por el amparo y los más vulnerables son todos aquellos a los que se les vencerá el amparo a partir de este martes.

Según datos del Servicio de Inmigración y Ciudadanía (USCIS), 13 mil permisos de DACA vencen este mes, 5 mil expiran en abril y casi 14 mil jóvenes perderán el amparo en mayo.

En Washington, más de 300 personas marcharon hasta el Capitolio, lugar donde varias decenas de manifestantes hicieron actos de desobediencia civil y fueron detenidos. Miles de personas alrededor del país se sumaron a esta iniciativa y salieron a las calles de Nueva York, Las Vegas (Nevada), Filadelfia (Pensilvania), Orlando (Florida) y Houston (Texas), entre muchas otras urbes.

Una de las manifestantes en Washington, Milagros Chirinos, de la Human Rights Campaign, recordó que los cientos de miles de dreamers quieren obtener un permiso “permanente” para quedarse a vivir en “el único país que conocen” y tener opción de optar a la ciudadanía estadounidense.

A pesar de que se presentaron varias propuestas legislativas en el Senado para sustituir el programa DACA, ninguna de ellas superó los 60 votos necesarios para ser aprobada por la cámara alta.

Trump exigió en enero que cualquier proyecto de ley sobre ese tema incluya fondos para el muro y reformas al sistema de migración legal, unas imposiciones que los demócratas no ven con buenos ojos.

La oposición demócrata y las organizaciones que abogan por los derechos de la comunidad hispana, que planearon las manifestaciones de ayer, critican que Trump esté usando como moneda de cambio el futuro de los “soñadores” para seguir con su línea dura en inmigración.

Apenas ayer, la Casa Blanca culpó al Congreso del fracaso en los esfuerzos para dar solución permanente a los jóvenes beneficiarios del DACA.

“Resulta terrible que el Congreso haya fracasado para actuar. El presidente (Donald Trump) le dio seis meses al Congreso y también les dio un plan”, dijo la vocera Sarah Sanders.

En un mensaje en Twitter esta tarde, Trump anotó: “es 5 de marzo y los demócratas no aparecen sobre DACA. Les di 6 meses, a ellos no les importa. ¿Dónde están? ¡Estamos listos para un acuerdo!”, dijo.

La portavoz dijo que la administración confía en ganar la batalla legal para suspender el programa.
Por lo pronto, los fiscales generales de California, Maine y Maryland pidieron “proteger” a estos jóvenes que han contribuido “enormemente” al país.

Difieren México y EU sobre narco

El presidente estadounidense, Donald Trump, acusó ayer a México, vía Twiter, de no hacer lo suficiente para detener el ingreso de drogas a Estados Unidos.

En respuesta, el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México, Luis Videgaray Caso, afirmó ayer que el tráfico de drogas es una responsabilidad compartida entre México y Estados Unidos.
También a través de Twitter, el canciller mexicano señaló que la cooperación entre ambos países se guía por dicho principio.

Destacó que sólo con el trabajo en conjunto en torno a la oferta y demanda de dichas sustancias ilegales, se podrá finalizar con el tráfico de drogas, dinero y armas entre ambos países

El Mandatario estadounidense abordó el tema del narcotráfico mientras se refería a México y Canadá, y una posible exención de los aranceles al acero y el aluminio si se firma un Tratado de Libre Comercio (TLC) justo.

 

Sobre drogas

El tráfico ilegal de drogas es una responsabilidad compartida entre México y EU y nuestra cooperación se guía por este principio. Sólo trabajando juntos sobre la oferta y la demanda podemos terminar con el flujo ilegal de drogas, dinero y armas entre nuestros países

Luis Videgaray
Canciller de México

 

México debe hacer mucho más para evitar que las drogas lleguen a EU. No han hecho lo que se debe hacer. Millones de personas adictas y moribundas

Donald Trump
Presidente de EU

JNO