Entre cuatro y 4.5 millones de dólares, es decir, entre 75 y 84 millones de pesos, cuesta publicitarse en los espejos retrovisores de un auto Fórmula 1.

 

La marca Pemex ocupará este espacio en los autos de la escudería Force India de la máxima categoría del automovilismo que conduce el tapatío Sergio Checo Pérez.

 

Si bien Pemex no dio a conocer el costo del patrocinio, el portal especializado f1aldia.com reporta los costos de la publicidad en cada uno de los espacios de los autos.

 

Según la publicación, el espacio más costoso de la carrocería es el de los pontones (los costados del coche), donde costaría entre 22 y 24 millones de dólares; en el ala trasera implicaría desembolsar entre 220 y 22 millones.

 

Pero el patrocinio incluye además colocar la marca Pemex en las playeras, el casco y las gorras del piloto mexicano, que tan sólo en la reciente edición del Gran Premio de México, en octubre pasado, se cotizaron entre dos mil y cinco mil pesos.

 

La estrategia trazada por la Subdirección de Comercialización de Combustibles de TransporteGerencia de Mercadotecnia y Desarrollo Comercial de Pemex Transformación Industrial (antes Pemex Refinación) incluye una campaña publicitaria por todos los medios: televisión, radio, prensa, revistas, cine, espectaculares , pantallas en restaurantes, estaciones de Metrobús, parabuses y medios digitales.

 

La estrategia responde a un diagnóstico: entre la marca Pemex y los consumidores mexicanos existe un sentimiento contradictorio de amor-odio; la causa del distanciamiento es la venta de litros incompletos.

 

Para restablecer el “lazo emocional”, la petrolera usará la imagen del piloto, “un personaje que represente al nuevo México, ganador y competitivo.
El objetivo: generar experiencias “memorables” a los consumidores y franquiciatarios, que vinculen la marca con el reconocido piloto de Fórmula 1

 

José Ángel Espinosa

 

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